Mendoza sella la paz con López Miras, pero insta al PP a «recuperar sus valores»

La UCAM abrió este viernes sus puertas al Gobierno regional con motivo del inicio del curso académico y selló la paz con el presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, vetado en el acto del año pasado. En esta ocasión, el jefe del Ejecutivo no solo fue invitado, sino que recibió una calurosa bienvenida. «Es una alegría que venga, y le pedimos que este Gobierno nos ayude a ir superando las dificultades», señaló el presidente de la UCAM, José Luis Mendoza. «Confiamos en que los problemas que tenemos se puedan solucionar», añadió.

Entre esos problemas figura la paralización de la ampliación del campus de Los Jerónimos y la petición a la Comunidad para que legalice las obras realizadas en su día sin licencia. De hecho, José Luis Mendoza se sentará próximamente en el banquillo por este segundo asunto. También está pendiente la apertura de la Facultad de Medicina en Cartagena y la negociación entre la UCAM y la Comunidad para el reparto de los nuevos alumnos en los hospitales públicos.

Mendoza mostró su confianza en que «con la ayuda del presidente de la Comunidad» se podrán ampliar las instalaciones de la universidad, «porque tenemos oferta para más de mil alumnos anuales que pueden venir de China».

El presidente de la UCAM y López Miras escenificaron su acercamiento con sonrisas y buenas palabras, si bien Mendoza recriminó al PP un supuesto alejamiento de los valores católicos. En este sentido, achacó la victoria de Vox en la Región en las elecciones del domingo a esta cuestión. «La gente quiere partidos que apoyen sus sentimientos, su forma de pensar. Los católicos defendemos la vida, la familia, y necesitamos partidos que también apoyen esto. Yo siempre he estado con el Partido Popular, y espero que recupere estos valores», advirtió. Un diplomático López Miras respondió que «los valores del PP siguen intactos». El PP «en el que creo y represento es un partido moderado, centrado en las personas, que sobre todo cree en la libertad para que cada uno decida lo que hacer con su vida», señaló.

El PP y Vox rivalizaron ayer por dejar patente su presencia en la UCAM. Los ultraconservadores estuvieron representados por un buen número de cargos, entre ellos su presidente, Pascual Salvador, y el diputado nacional Joaquín Robles, quien calificó la apertura del curso de acto de «resistencia» ante las políticas del Gobierno socialista. La formación del nuevo Ejecutivo fue de hecho el centro de las críticas de José Luis Mendoza. «Nos puede esperar la ruina con un gobierno bolivariano», advirtió. «Me asusta el nuevo Gobierno. Que un partido como el PSOE pacte con Podemos, un partido antisistema y anticatólico, es gravísimo; no sé lo que nos puede esperar», señaló. Para Mendoza, el nuevo ejecutivo de izquierdas «puede hacer un daño irreparable a España». Por eso, pidió «a los creyentes que recen» para que no se lleve a término. «Como católico, como universidad católica, estamos en contra de este pacto», proclamó.

Pese a la nueva fase en las relaciones con el Gobierno regional, Mendoza mantiene su advertencia de que se llevará en breve el domicilio social y fiscal a Madrid si finalmente la Agencia Tributaria obliga a la universidad a pagar cuatro millones por donaciones que la institución desgravó pero que Hacienda considera un gasto. «El domicilio fiscal y social me lo llevo -explicó-; no puede ser que la Agencia Tributaria, por las donaciones que hemos hecho en los últimos cuatro años a cerca de 200 asociaciones, nos haga pagar varios millones de euros. Lamentablemente es una pérdida para Murcia de más de 70 millones de euros, pero es que no puede ser, es una injusticia que no tiene nombre».

El acto estuvo presidido por el cardenal Aquilino Bocos, quien hizo un llamamiento a la moderación. «Tenemos que guardar mucha serenidad y respeto por parte de todos, para lograr ser libres sin imponer a nadie cosas que no se pueden imponer», señaló. Los «extremismos», vaticinó, «se curan con el tiempo».