Los jóvenes de la Región de Murcia prefieren ser empresarios que funcionarios o asalariados

El informe señala que los jóvenes de entre 18 y 34 años constituyen el 20,3% de la población de la Región, 1,3 puntos por encima de la media nacional, habiendo también proporcionalmente más españoles y menos extranjeros que en el conjunto del país. También se rebasa la media estatal en tasa de fecundidad, con la edad media de maternidad (30,14) más baja por autonomías, solo por debajo de Ceuta y Melilla. En el aspecto laboral, la tasa de empleo es mayor que la de España entre los que tienen edades comprendidas entre 16 y 24 años, aunque estos se ven afectados por la temporalidad.

Quizás esta inestabilidad explique las preferencias que tienen a la hora de desarrollar su carrera profesional. Un 38,4% de encuestados afirman que quieren trabajar por cuenta propia, creando su propia empresa, frente a un 36,4% que reconoce su deseo de ser funcionario de la Administración pública y un 24,8% que se ve trabajando como asalariado en una empresa privada.

Asimismo, esta visión emprendedora está más extendida entre los hombres que entre las mujeres, así como entre quienes no cuentan con estudios superiores, aunque ambos géneros coinciden en destacar la dificultad que supone actualmente montar una empresa y alcanzar el éxito.

En cualquier caso, los jóvenes de la Región no tienen una visión materialista del trabajo ni de la vida, pues el salario (20,2%) ocupa el tercer lugar en la lista de factores de importancia que influyen en los jóvenes a la hora de aceptar una oferta de empleo. Los epígrafes más valorados son la conciliación de la vida familiar y laboral (30%) y la estabilidad (22,6%), mientras que las oportunidades de desarrollo profesional y personal solo interesan al 19 y al 8,2%, respectivamente.

Del mismo modo, el grado de satisfacción de los jóvenes con el mercado laboral es mayoritariamente bajo. El 75% de encuestados reconoce estar insatisfecho, siendo mayor el porcentaje (82,8%) entre los de edades comprendidas entre los 18 y 24 años.

El estudio del CES hace hincapié en las dificultades de emancipación de los noveles murcianos, que en 2024 se situó en el 15,1%, nueve puntos por debajo de 2026. Principalmente, por la dificultad en el acceso a la vivienda, que se ha convertido en uno de los principales problemas en toda España desde hace algún tiempo. Pese a que prácticamente la totalidad de encuestados anhela tener una vivienda en propiedad (88,8%), especialmente las mujeres (93,5%), solo un 21% (dos de cada diez) de los encuestados residía en casa propia, habitando el 46% todavía con sus padres o familiares, mientras que un 31,2% lo hacía en régimen de alquiler. El precio de la vivienda y otros factores de índole económico son las causas que disuaden a la mayoría de jóvenes (65,2%%) de adquirir una casa en propiedad. Como datos curiosos, un 11% de encuestados (con mayor proporción en los hombres que en las mujeres) afirma que prefiere residir con sus padres o compartir piso con amigos en lugar de tener una vivienda propia. Por otro lado, Un 39,6% de las personas jóvenes (mayormente los hombres) no conoce ninguna medida de apoyo implementada por las administraciones públicas (nacional, regional o municipal) para la adquisición o alquiler de vivienda.

Por otro lado, el 70,6% de los jóvenes de entre 18 y 34 años de la Región perciben que sus opiniones no se tienen en cuenta a la hora de la toma de decisiones por parte de las administraciones públicas. Esto genera cierta desidia a la hora de la participación en los asuntos públicos, admitiendo el 78% de los hombres y el 74,8% de las mujeres que no lo hace «nunca o casi nunca». . Su satisfacción con la formación cívica es escasa: un 82,6% considera que el sistema educativo no le ha preparado suficientemente para participar en la vida política y social. En ese sentido, la brecha en el abandono escolar entre la Región de Murcia y el resto de España sigue siendo alta.

En cuanto a los que sí intervienen en la vida pública, la actividad que más realizan es el apoyo a distintas causas a través de internet o colaborando con su firma (24,4%), el voluntariado en organizaciones sociales y medioambientales (18,8%) y la asistencia a protestas o manifestaciones (10%). Solo un 3,6% de los entrevistados confiesa haberse afiliado a un partido político.

Por otra parte, mientras que las mujeres de entre 18 y 34 años se preocupan mayoritariamente por temas educativos y culturales y por la igualdad de género, los hombres se interesan más por actividades deportivas y la tecnología. Los derechos laborales interesan a ambos sexos.

La profesora del Departamento de Sociología de la Universidad de Murcia y coordinadora de este estudio realizado para el CES, Pilar Ortiz, destaca un dato del informe, concretamente sobre diversidad, que le ha llamado mucho la atención a título particular. Así, resalta la coordinadora que, mientras que solo un 9,6% de los encuestados declaran pertenecer a un colectivo específico, más del 22% dice haber sufrido dificultades significativas de inclusión social, «lo que evidencia una brecha entre la vivencia personal y el reconocimiento de la diversidad».

El informe del CES establece una serie de recomendaciones a las administraciones públicas de la Región para afrontar las inquietudes de la población más joven, tanto en los aspectos relacionados con el acceso a la vivienda, clave para la emancipación, como la prevención de los problemas de salud mental.

En materia de vivienda, el informe propone aumentar las ayudas directas para el alquiler y compra a la población joven, evitando duplicidades y asegurando la eficiencia en la gestión de recursos. También «diseñar programas de vivienda asequible con modalidades como el alquiler con derecho a compra» y «promover incentivos fiscales para propietarios que ofrezcan alquileres».

En ese sentido, cabe recordar que el Gobierno regional acaba de aprobar un decreto en el que establece la modalidad de vivienda asequible dentro de las VPO, con el objetivo de fomentar la construcción de 25.000 viviendas para jóvenes en cinco años.

Asimismo, con el fin de seguir incrementando las vocaciones emprendedoras, el estudio plantea «diseñar y difundir políticas y programas específicos -diferenciado actuaciones en razón de género y edad- de apoyo a los jóvenes emprendedores». En ese sentido, algunas propuestas son facilitar el acceso a créditos -microfinanzas-, simplificar trámites administrativos, promover redes de mentores y proporcionar formación especializada.

En cuando a educación, se propone incrementar las ayudas que garanticen la igualdad de oportunidades y la permanencia en el sistema educativo, intensificando los esfuerzos en la orientación y formación del profesorado, estudiantado y asociaciones de padres, tanto en materia de convivencia escolar como en la correcta gestión de la diversidad en sus aulas.

En lo referido a la prevención de los problemas de salud mental, los autores señalan como necesario fomentar la educación emocional y el acceso a servicios de apoyo que faciliten la gestión del estrés y la ansiedad de la población joven. También consideran prioritario que los jóvenes de la Región cuenten con mayores recursos informativos y económicos para mejorar la capacidad de afrontamiento de problemas de salud mental.