Las gasolineras de bajo coste se duplican en dos años en la Región de Murcia y suponen ya tres de cada diez
Con la pandemia se produjo el gran salto de las estaciones de servicio automáticas en la Comunidad, que ascienden ya a 139
Las gasolineras de bajo coste representan ya casi tres de cada diez estaciones de servicio en la Región de Murcia. Su modelo ... de precios más competitivos, con un repostaje simplificado y sin colas se consolida cada vez más entre los ciudadanos. En total, se contabilizan 139, con datos a fecha del pasado mes de mayo, cuando en 2013 ascendían a 63. Eso supone duplicar esa cifra en apenas dos años, un 120,63% superior. Además, el 29,57% de cuota alcanzada con respecto al conjunto de 470 gasolineras existente es el sexto mayor del país.
La Asociación Española de Estaciones de Servicio Automáticas (Aesae) recoge estos datos en su informe sectorial 2025, presentado ayer, que confirma la plena consolidación de este formato. Y es que, en global, las estaciones de servicio automáticas (ESA) suponen el 29% del mercado nacional –muy similar al promedio regional–, alcanzando así 3.477 instalaciones activas. Porque solo en seis años, justo desde el estallido de la pandemia de la covid, este tipo de instalaciones han pasado de ser una alternativa emergente a convertirse en un pilar estructural del propio sector.
TASA DE PENETRACIÓN
-
Navarra 39,45%.
-
C. Valenciana. 36,68%.
-
Cataluña 35,11%.
-
Andalucía 32,08%.
-
Canarias 31,24%.
-
Región de Murcia 29,57%.
-
Madrid 28,85%.
-
País Vasco 27,27%.
-
La Rioja 26,44%.
-
Castilla-La Mancha 26,17%.
-
Extremadura 24,26%.
-
Aragón 23,98%.
-
Castilla-La Mancha 26,17%.
-
Castilla y León 22,91%.
-
Cantabria 21,34%.
-
Galicia 19,39%.
-
Asturias 14,63%.
-
Baleares 5,96%.
«Los consumidores han normalizado el uso de las gasolineras automáticas y las perciben como parte natural de la red de suministro. Lo que en 2020 se consideraba una novedad, hoy es ya un estándar consolidado», resalta el presidente de la patronal sectorial Aesae, Manuel Jiménez. Hace hincapìé en que «la rapidez, el ahorro y la autonomía son factores que han calado entre los conductores españoles, que cada vez valoran más su eficiencia y la flexibilidad».
En el histórico de estadísticas que maneja esta organización sectorial se contabilizaban en 2019 únicamente 15 estaciones bajo este modelo en la Comunidad sobre un total de 384 gasolineras. Eso se traducía entonces en una escasa tasa de penetración del 4%. Un índice muy inferior a la media nacional, que era del 8,5%.
Entre los factores que explican este crecimiento, desde el sector ponen el foco en el cambio de hábitos de consumo. Ahí, la búsqueda de ahorro económico por parte de los clientes en un contexto de inflación energética como el acontecido en los últimos años ha acabado por convertir el precio en el gran elemento diferencial frente a las gasolineras tradicionales. De hecho, los consumidores acaban por buscar opciones más económicas y estables ante la variabilidad del mercado.
Tampoco se puede obviar en este desarrollo la expansión territorial de esta modalidad hacia zonas de la geografía española donde apenas existía este modelo, así como también su normalización como opción estándar en la mente del consumidor y, por supuesto, la eficiencia y sostenibilidad que conlleva, con una reducción de costes operativos y alineación con los objetivos de transición energética europea.
Reconversión de tradicionales
En Aesae reivindican que se se trata de un modelo «probado, seguro y exitoso, como se ve en la curva de evolución». De ahí que las expectativas apuntan a que en los próximos años no solo se abran más estaciones de servicio sin personal de atención, sino que algunas de las tradicionales se reconviertan. Y es que la reducción de costes refuerza su competitividad.
La Comunidad ocupa el sexto puesto del país en cuanto a la cuota que representan las gasolineras 'low cost'
Al respecto, grandes compañías operadoras de referencia en la distribución de carburantes han dado ya pasos firmes por integrar estaciones automáticas en su red. Por ejemplo, está el caso de Cepsa, que adquirió las estaciones de Ballenoil, una de las firmas pioneras en el sector de las gasolineras 'low cost'. De igual manera, el gigante Repsol, con su marca Campsa Express, ha explotado esta vía en el último decenio. Y hasta grandes fondos de inversión como Portobello Capital y Tensile Capital Management se han adentrado en esta sector con la toma de control de Plenoil.
Porque este modelo de estaciones sin personal se ha extendido con fuerza a nuevas provincias y comunidades donde apenas tenía presencia, gracias a su mayor rentabilidad, lo que ha permitido multiplicar la red y acercar las ESA a un público más amplio.
De hecho, lo que en 2020 era percibido como una alternativa novedosa, cinco años después es asumido como un formato estándar del sector, que además ha construido una percepción social positiva.
«Los consumidores han normalizado su uso y las perciben como parte natural del suministro», destacan desde Aesae
Ni siquiera lastran su crecimiento las dudas lanzadas a veces a la opinión pública sobre la calidad del combustible que se suministra en estos establecimientos. Y es que se reitera que se cumple con todos los estándares mínimos, regidos por la normativa estatal, más allá de que las gasolineras tradicionales se diferencien por los aditivos específicos que aplican a su producto final. Por tanto, el sector lo considera un debate superado.
Diferencias regionales
El análisis territorial muestra que la penetración es desigual, pero la tendencia expansiva es clara. Andalucía lidera en volumen total con 745 estaciones de servicio automáticas, seguida por la Comunidad Valenciana (482). Aunque en términos relativos, el mayor crecimiento corresponde a las Islas Canarias, que ha multiplican por cinco su red en los últimos dos años hasta alcanzar las 154 estaciones (+431%). También destacan Navarra (de 24 a 101, +321%), Castilla-La Mancha (263, +105%). También destaca la evolución murciana.
En el otro extremo, Cataluña y Madrid, aunque concentran un volumen importante de estaciones (534 y 255 respectivamente), registran crecimientos más moderados, en torno al 19% y 24%. Por último, Baleares es la única comunidad que reduce su número de ESA, pasando de 24 en 2023 a 13 en 2025 (-46%).
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión