Las 'estrecheces' de los vigías del medio ambiente

Este agente conforma uno de los nueve equipos que el Seprona tiene desplegados en la Comunidad -concretamente en Murcia, Abarán, Jumilla, Caravaca de la Cruz, Torre Pacheco, Cartagena, Águilas, Alhama y Lorca-, coincidiendo con parajes de especial relevancia medioambiental. La Dirección General de la Guardia Civil, a preguntas de LA VERDAD, rechaza ofrecer información sobre el número de agentes que conforman estos grupos -ni los del servicio marítimo-, alegando que se trata de datos «confidenciales».

A día de hoy, según explican desde AUGC, cuatro agentes nutren de media cada una de estas unidades. Esa cifra, lamentan, se mantiene estable desde que esta unidad echó a andar a finales de los 80. La organización incide en que se trata de un proyecto pionero, que ha sido aplaudido incluso como la mejor policía medioambiental de Europa y que «lo están dejando morir».

Este componente del Seprona, con décadas de ejercicio a sus espaldas, explica que inicialmente las funciones que la unidad tenía asignadas se centraban en el control de la caza y la pesca, pero que a día de hoy éstas se han multiplicado exponencialmente, asumiendo áreas tan diversas y esenciales como el control de vertidos, la investigación de incendios, la gestión de residuos, el maltrato animal... El secretario provincial de AUGC, Juan García Montalbán, remarca que, «los equipos territoriales deben, al menos, duplicarse a ocho o diez agentes». La situación actual, advierte, impide una labor proactiva. «El control presencial no existe. Existe a demanda. Se pone una denuncia y cuando haya una patrulla irá a comprobarla».

AUGC recuerda además que hace unos meses la Dirección General de la Guardia Civil puso encima de la mesa un polémico proyecto que pretendía reorganizar estas unidades. Subraya que la iniciativa, que actualmente ha sido suspendida, contemplaba unificar grupos cercanos reduciendo el número de agentes en lugar de su necesario aumento. «Es un proyecto que estará en un cajón pero dentro de unos años lo volverán a sacar porque el otro camino es aumentar los catálogos de trabajo», teme el secretario provincial.

A las reivindicaciones por la escasez de plantilla, el componente del Seprona añade las quejas por el material con el que se ven obligados día a día a desarrollar su labor. Este agente asegura que trabajan con vehículos muy antiguos que ya han rodado más de 400.000 kilómetros. Además, explica que para llevar a cabo las labores de oficina -como la transcripción de las denuncias o la elaboración de informes- cuentan con un único ordenador para cinco guardias. «Tenemos que hacer cola para poder cursar las denuncias», lamenta.

La situación en el servicio marítimo no es mucho más halagüeña, conforme a la radiografía que ofrece AUGC. Esta unidad, asentada en el puerto de Cartagena, se creó a principios de los 90 y la asociación asegura que tampoco ha visto crecer su equipo. A día de hoy, unos 30 guardias conforman la plantilla de «operativos». La organización remarca que utiliza este término porque, en ocasiones, las estadísticas se nutren con personal de oficina que, aunque realiza una importante labor, no se sube al barco. AUGC advierte de que esa cifra es «insuficiente para mantener la patrullera activa las 24 horas los treinta días del mes».

Además, en verano, explica, suele haber un porcentaje mayor de agentes que se encuentran disfrutando de las vacaciones estivales y, por lo tanto, la plantilla se resiente. Incide, asimismo, en que estos agentes se encargan de velar por la seguridad de sus dependencias en el puerto de Cartagena y deben realizar, todos los meses, varios servicios de seguridad del acuartelamiento de Cartagena, «lo que da un pellizco a la plantilla que tienen».

AUGC hace hincapié en que la plantilla del servicio marítimo de la Guardia Civil debe aumentar hasta el medio centenar de agentes operativos para poder dar un servicio de 24 horas treinta horas al mes. García Montalbán remarca que ésta es una reivindicación por la que llevan muchos años batallando, pero advierte de que existen dos aspectos que, de un tiempo a esta parte, han agravado la realidad que atraviesa esta unidad. Uno de ellos es el fenómeno de la inmigración irregular y la apertura de la conocida como vía de Argelia, que arrancó en 2008 pero «que se ha incrementado de una manera bestial en los últimos años. La sobrecarga de trabajo para hacer frente al desafío migratorio, explica, exige a los agentes «un esfuerzo sobrehumano». En ocasiones, remarca, los guardias exceden sus turnos o se presentan para trabajar en sus días libres. «Es imprescindible que el servicio esté garantizado 24 horas porque te puede surgir cualquier incidencia grave», subraya. «Por el propio servicio y por la propia seguridad de los guardias civiles».

El portavoz de AUGC explica que la tripulación por patrullera está siendo de media de cuatro agentes, pero denuncia que este número, en muchas ocasiones, «se queda escaso» y debería aumentar, al menos, en un componente. Recuerda que esta unidad soporta sobre sus espaldas, además de la ayuda a las pateras, otro sinfín de cometidos en torno a la vigilancia del mar territorial, como el narcotráfico, la pesca furtiva, fondeo de barcos, delitos medioambientales en el mar, expolio de restos históricos, control de buceo... Una carga de trabajo importante a la que, subraya García Montalbán, los agentes han sumado en los últimos años un especial control del Mar Menor. La laguna, subraya, «requiere una vigilancia especial que, al menos en el periodo estival, debería ser prácticamente a diario». AUGC destaca que gracias al esfuerzo de la jefatura del Servicio Marítimo se realizan actualmente dos servicios semanales. Un esfuerzo, incide, que «resulta insuficiente debido a la explotación de la actividad marítima» de este estío.

El delegado del Gobierno asegura, a preguntas de LA VERDAD, que «soy exigente, y el número de efectivos siempre me parecerá insuficiente». Vélez hace hincapié en su esfuerzo para que aumenten las vacantes de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la Región, pero incide en que «venimos de una situación muy dura para nuestros agentes de recortes de salarios y efectivos por parte del anterior Gobierno de Mariano Rajoy». El delegado sostiene que, en los últimos cuatro años, han recuperado «las 322 plazas destruidas por Rajoy» y «mejorado las condiciones salariales de policías y guardias civiles».

Vélez se muestra sorprendido por las quejas de AUGC ante la fiesta ilegal de la isla del Ciervo. Remarca que ese festejo no se produjo por falta de efectivos del Servicio Marítimo y lo achaca a «la habitual dejación de funciones del Gobierno regional, administración competente en materia de protección medioambiental en el entorno en el que se produjo».