El currículo de Primaria ataja el cobro de horas lectivas extra en los colegios de la Región de Murcia

El decreto, que marca que el horario lectivo de los colegios será de 25 horas semanales, establece que los centros podrán solicitar a la Consejería la ampliación del horario lectivo establecido con carácter general hasta un máximo de 30 horas semanales, siempre y cuando no se supere un máximo de seis horas lectivas al día. La ampliación de sesiones lectivas semanales se destinará a incrementar el número mínimo de horas semanales de materias como Lengua, Inglés, Matemáticas... «En el caso de los centros sostenidos con fondos públicos, esta ampliación no podrá suponer aportación económica por parte de las familias, ni exigencias para la Administración educativa», remarca el decreto, que cierra así la puerta de forma taxativa a la posibilidad de que los centros concertados reclamen a las familias mensualidades por esa sexta hora extra, que los colegios pueden ofrecer para mejorar su oferta. El texto normativo especifica que los colegios no podrán tampoco reclamar más dinero a la Consejería por ese concepto.

El decreto da firmeza también al veto parental edulcorado que ya se aplica en colegios e institutos de la Región, al encajarlo en su articulado. El veto, que Educación justifica en su afán de que los padres de alumnos reciban información sobre las actividades complementarias a las que asisten sus hijos en el centro, se aplicará en su versión más 'light', la misma que contienen las instrucciones de inicio de este curso. Así, se establece que la información de cada actividad complementaria que vaya a ser impartida por personas ajenas al claustro se seguirá facilitando a madres, padres o tutores legales del alumnado de forma detallada al menos siete días antes de su celebración a través de una circular y tendrán que contar siempre con la presencia de un docente del centro.

Educación mantiene fuera el requerimiento de autorización a los padres para la asistencia de sus hijos a las actividades, aunque sigue dándoles el control al otorgar una semana de margen para que decidan si envían a su hijo a clase ese día o no. «Se hará llegar a los padres, madres o tutores legales del alumnado información detallada de todas las actividades complementarias programadas que vayan a ser impartidas por personas ajenas al claustro de profesores del centro educativo siete días antes de la celebración de cada una», recoge el decreto de currículo, que debe aplicarse este año en los cursos impares de Primaria.