La Unidad contra el Tabaquismo trata la adicción de 294 pacientes murcianos
Los usuarios reciben el alta cuando logran estar un año sin fumar ni un solo cigarrillo
La Organización Mundial de la Salud (OMS) sitúa la dependencia del tabaco como una enfermedad adictiva crónica que es el principal problema sanitario en los países desarrollados.
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Además, es la primera causa de muerte prevenible en el mundo. En las sociedades avanzadas, igualmente, el tabaquismo pasivo es la tercera causa de muerte prevenible. Con este panorama encima de la mesa, las instituciones se afanan en implementar medidas que sirvan para reducir la población fumadora en sus territorios. En el caso del Ayuntamiento de Murcia, desde el Servicio de Salud diseñan diversas estrategias orientadas a la prevención y el tratamiento.
Claves para evitar la recaídas
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1 Distancia. En los primeros meses es clave no llevar tabaco ni estar cerca de sitios donde se fume.
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2 Apoyo. Es importante buscar refugio en amigos y familiares no fumadores y hablar con ellos.
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3 A evitar. No exponerse a lugares, actos y situaciones que inciten al consumo de tabaco.
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4 Control. Tener siempre presente que el deseo de fumar dura unos minutos y desaparece.
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5 Fortaleza. No caer en la tentación de encender un cigarro. Ni solo para una calada.
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6 Ánimo. Valorar el esfuerzo realizado y sentir orgullo por seguir sin fumar.
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7 Perseverancia. Cuando lleguen las ganas de fumar, pensar en sus consecuencias negativas.
La Unidad de Tratamiento contra el Tabaquismo trata a 294 pacientes con el objetivo de superen el vicio de llevarse un cigarrillo a la boca. «No hay que olvidar que el tabaquismo es como una epidemia. El cigarro está aceptado por la sociedad, pero es el causante de millones de muertes todos los años en nuestro país», precisan los técnicos. Aunque el equipo de gobierno carece de competencias en materia de asistencia sanitaria, sí contribuye a que cientos de personas superen todos los años la adicción a fumar.
El tiempo de espera no excede de 45 días, aunque suele haber una gran demanda en las primeras semanas de cada año
Según los últimos datos que obran en poder de la Concejalía de Salud, la Unidad contra el Tabaquismo atiende a 294 pacientes. La edad media de los usuarios es de 52 años. La mayoría son mujeres, con 166. Representan a un 56% del total. La edad media de las féminas que se encuentran en tratamiento es de 50 años y los varones presentan, de media, 53 años.
22 años de trayectoria
Esta unidad comenzó a funcionar en 1998. A lo largo de sus 22 años de trayectoria ha guiado a miles de murcianos en el complicado camino de dejar de fumar. Las recaídas son algo que está a la orden del día. Por eso, una parte de la terapia que siguen los usuarios se apoya en la psicología. Los expertos enseñan patrones de pensamiento a sus pacientes para que no les venza el desánimo en el caso de que recaigan y vuelvan a fumar.
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De hecho, los usuarios siguen en tratamiento hasta que consiguen estar un año sin fumar ni un solo cigarrillo. Los médicos de cabecera son los profesionales que derivan pacientes a la Unidad contra el Tabaquismo. Aquellas personas que manifiestan de forma expresa un interés real por abandonar el hábito tabáquico son los que se derivan a la terapia. En el centro de salud correspondiente elaboran un informe que remiten al Servicio de Salud del Ayuntamiento.
Tras las vacaciones
La consulta de lucha contra el tabaquismo la integran dos médicos y una enfermera. El tiempo de espera para acceder al programa de deshabituación es variable. Está a expensas de la demanda que exista en cada momento.
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Por lo general, en los primeros meses del año y después de las vacaciones de verano es cuando se deriva a un mayor número de pacientes. Los médicos de la unidad se encargan de valorar la gravedad de cada caso y asignan un tiempo de espera. A las personas que presentan una situación más grave se les brinda una atención preferente y la terapia la suelen comenzar en una semana. En el resto de los casos, el tiempo de espera nunca excede de los 45 días. Los pacientes también se pueden acoger a un programa de prevención del sobrepeso. Los participantes deben encadenar, la menos, tres meses sin fumar para poder participar en este tratamiento contra la obesidad.
«Te estás matando a ti mismo y no eres capaz de frenar la situación»
Uno de los muchos pacientes que han pasado por la Unidad de Tratamiento contra el Tabaquismo es Carmelo Beltrán. «Llevo más de diez años sin fumar y es la mejor decisión que he tomado en mi vida». Recuerda que «con cada cigarrillo que te fumas te estás matando a ti mismo y no eres capaz de frenar la situación. Yo ahora lo veo como algo ilógico, pero cuando tienes el vicio es muy complicado de gestionar». En su caso, libró una batalla interna. «Quería dejar de fumar, pero no podía. Al final, todos los días acababa encendiendo los cigarrillos». Comprendió que necesitaba «una muleta» para superar la adicción que tenía por el tabaco. Fue entonces cuando pidió cita para que lo vieran en la consulta de la Unidad contra el Tabaquismo y «a las pocas semanas me llamaron y empecé». Según recuerda, «en las primeras sesiones lo más importante para mí era que me escuchaban y me ayudaban a enfrentarme a la tentación diaria de fumar». Por eso, otorga mucha importancia a «la fortaleza psicológica que te transmiten durante la terapia. Eso fue clave para superar las recaídas y alcanzar el primer año sin fumar. Ahí todo cambió».
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