Salvada 'in extremis' la obra de adecuación del camino al Castillo de Monteagudo
Los propietarios negociaron ayer hasta el último momento mejoras futuras en su finca antes de dejar derribar su casa
Los propietarios de una de las casas afectadas por la adecuación del camino al Castillo de Monteagudo estuvieron a punto de impedir que las obras comenzaran y, de hecho, retrasaron un día el derribo de la vivienda que habían cedido sin contraprestación económica al Ayuntamiento. Estos trabajos son imprescindibles para que pueda comenzar la rehabilitación del histórico sitio, que ya tiene contratada el Ministerio de Cultura.
El Ayuntamiento de Murcia había previsto comenzar ayer la demolición del inmueble, ubicado en la avenida Alfonso X el Sabio de la pedanía murciana, tras la cesión anticipada de la finca, pero sus propietarios pusieron una serie de condiciones previas. Mari Carmen Cuello y Santiago Navarro explicaron a LA VERDAD que toda la negociación se había hecho «demasiado rápido» y no les habían garantizado las condiciones que pusieron y que ellos consideraban necesarias: el vallado del solar con la nueva linde, el soterramiento de la línea de media tensión que tiene sobre su tejado –y mientras, situar el poste con el cable en un lateral–; la colocación de los contadores de luz y agua al borde de la valla para facilitar su lectura; además de pavimentar la calle con la nueva anchura. La canalización subterránea también permitirá introducir las líneas de telecomunicaciones en un futuro.
Hasta el lugar se desplazaron varios técnicos de las concejalías de Fomento y Urbanismo, con sus responsables al frente, Mario Gómez y Andrés Guerrero, que estuvieron hablando con los vecinos. Al final, Gómez se comprometió a cumplir con las demandas de los dueños, por lo que la pala entrará hoy en la casa.
«Todos hemos cedido en algo, y lo importante es que se haga la obra en el castillo por el bien de la pedanía y de los vecinos», apuntó Navarro. Gómez agradeció a la familia «que siempre haya estado dispuesta a colaborar» y le pidió «confianza en que vamos a cumplir lo acordado». El edil lo tuvo claro desde el principio «una línea (en referencia al tendido eléctrico) no va a parar esto». El presupuesto, que incluye el derribo de otra casa, alcanza casi los 40.000 euros, y está previsto acabar a finales de noviembre.
El PP ve «una chapuza»
El edil del PP Marco Antonio Fernández, anterior responsable del proyecto, se acercó a la zona y advirtió de que lo que se iba a hacer «es una chapuza», pues no contempla ni la ampliación del ancho del camino a seis metros, «que es lo que nos reclamaron en el plan director de la obra del castillo», ni se rebaja la pendiente a menos del 14%. «Solo se ha previsto ampliar la entrada sin actuar más arriba; y no va a ser suficiente para el tránsito de la maquinaria», dijo.
