Actuación policial del pasado 3 de febrero en el barrio de La Paz, en la que tuvieron que intervenir trabajadores de la empresa distribuidora para cortar enganches ilegales. ROS CAVAL / AGM

Más de la mitad del fraude eléctrico del barrio murciano de La Paz presenta un volumen casi «industrial»

La empresa distribuidora detecta en una reciente batida hasta 41 enganches ilegales, gran parte de ellos relacionados con el cultivo de marihuana en pisos

Miércoles, 16 de febrero 2022, 02:34

Casi por casualidad, la Policía Local se encontró con numerosos cultivos ilegales de marihuana en edificios del barrio de La Paz. En una persecución a ... unos jóvenes por cuestiones distintas, agentes municipales se percataron el pasado jueves 3 de febrero de la existencia, en un bloque de la calle Río Tajo, de una plantación 'indoor' de cannabis. Lo que empezó por un inmueble, acabó revelando la existencia de siete viviendas ubicadas en la misma zona con hasta 1.200 plantas de marihuana. En aquel momento no hubo detenciones, ya que los pisos no contaban con moradores y se encontraban ocupados únicamente por la droga.

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Al lado de los efectivos de Policía Nacional que estaban desmantelando las instalaciones se encontraban los sufridores técnicos de la compañía encargada del suministro eléctrico, a los que los propios agentes protegían para que pudieran desempeñar su labor. Saben que no son bienvenidos por estos lares, dadas las reiteradas amenazas que reciben en cada visita que realizan al barrio, muchas de ellas para acabar con los consabidos enganches ilegales. «La relación con la empresa es recíproca y habitual; a veces nos llaman para informarnos de un presunto delito de defraudación del fluido eléctrico y pedir protección, y otras los llamamos nosotros porque cada plantación suele llevar aparejado un enganche de este tipo», indican fuentes policiales.

Un enganche en una farola. LV

No es fácil, ni siquiera para la compañía eléctrica, discriminar qué porcentaje de viviendas de esta zona dominada por las viviendas sociales consume luz sin pasar por taquilla, pero una batida realizada a finales del mes pasado, en colaboración con los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, llevó a la detección de 41 conexiones directas a la red, sin paso previo por el contador. «Es más que patente que en esta zona se viene detectando un consumo muy superior al que podría corresponder a una vivienda», señalan fuentes de la distribuidora.

Estas prácticas generaron el año pasado en el barrio unas 170 averías en la red; «tiran los cables otra vez en 24 horas», dice un vecino

Es cierto que esta cifra incluía fraudes con un carácter de suministro doméstico, pero más de la mitad de ellos muestra un consumo muy superior al que puede corresponder a un domicilio estándar, y ofrecen un perfil casi «industrial», según la compañía, lo que se corresponde con el abastecimiento de las instalaciones necesarias para el cultivo de este tipo de plantas.

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«Riesgo para la seguridad»

«Estas conexiones conllevan un elevado riesgo para la seguridad de la instalación y de las personas», añaden las mismas fuentes, y destacan que se realizan «continuas intervenciones» para cortar estos empalmes. Asimismo, se llevan a cabo revisiones «a diario y en los momentos punta de demanda para detectar enganches y sobrecargas en la red», añade. Además, destacan que se «han mantenido reuniones con las distintas administraciones de coordinación de actuaciones para mitigar la situación, ya que la problemática social es creciente». La prioridad es «mantener el suministro de calidad para los clientes contratados y la seguridad de las instalaciones». De hecho, estas conductas delictivas generaron durante el año pasado hasta 170 incidencias en la red eléctrica a su paso por los polígonos de La Paz y La Fama. Entre ellas, destacan las relacionadas con fusibles fundidos por sobrecarga de las líneas y cortocircuitos provocados por falsos contactos en red, con el consiguiente riesgo de incendio, como ya ha ocurrido en alguna ocasión en esta zona, y con la incomodidad de sufrir cortes de luz a causa de estas averías.

No obstante, pese a esta actividad preventiva e inspectora, vecinos de la zona denuncian a LA VERDAD que los enganches al alumbrado público que se retiran vuelven a colocarse en 24 horas. «Incluso hemos estado días sin luz en las farolas porque manipulan el reloj de encendido para concentrar la potencia en las horas que mejor vienen para el consumo», asegura el alcalde pedáneo del Distrito Este, Rafael Gómez, que engloba a los barrios de La Fama, La Paz y Vistabella. Desde la empresa distribuidora se explica que la mayoría de los enganches se realizan directamente a la red aérea de baja tensión que discurre por las fachadas.

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Esta problemática, que se extiende por otras zonas del municipio como la barriada del Espíritu Santo, fue denunciada recientemente por la Junta Municipal del Distrito Este, que amagó con plantarse o, incluso dimitir, si no empezaban a abordarse con determinación los problemas de estos vecindarios. «Se nos ha convocado el próximo sábado para empezar a abordar una hoja de ruta para la mesa de trabajo del barrio», concluye Gómez.

Intentos de regularizar a los defraudadores interesados

El pedáneo del Distrito Este, Rafael Gómez, mantuvo la semana pasada una reunión con el delegado del Gobierno, José Vélez, en la que se puso sobre la mesa la problemática de los enganches ilegales. «Le llevé fotos de farolas con una docena de cables y le pedí que, además de seguir luchando contra el cultivo y la venta de droga, nos ayude, junto con la compañía eléctrica, a intentar regularizar dentro de la facturación a todo el que esté interesado, haciendo borrón y cuenta nueva», señaló tras la cita. En esta situación se encuentran los bloques 3 y 4 de la calle Santa Rita, en La Fama, que además carecen de suministro desde hace dos meses por una «estafa» a la hora de cambiar los contadores.

«No solo nos les colocaron los nuevos, sino que se llevaron los que había», asegura, y recuerda que «en ese bloque viven personas mayores que necesitan oxígeno o recién nacidos; y no se puede poner la lavadora, cocinar o encender la tele». «Estamos haciendo gestiones desde la junta y esperamos resolverlo todo en días», indica Gómez, al tiempo que reconoce que, por ejemplo, del casi medio centenar de viviendas que incluye el bloque 4, apenas una decena paga la luz. «Parece que hay gente interesada ahora en legalizar su situación, pero al final pagan justos por pecadores», indica.

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