La parroquia de Churra recupera las joyas que un vecino robó a la Patrona
El delegado del Gobierno señala «que no solo es un delito contra el patrimonio, sino contra los sentimientos religiosos»
La parroquia de Nuestra Señora de la Encarnación de Churra recibió ayer la visita del delegado del Gobierno, Francisco Bernabé, quien hizo entrega de las joyas robadas el pasado viernes a la Patrona. El párroco, Antonio Andreu, recibió la medalla, una cadena y un pendiente de oro de la Virgen que fueron sustraídos por un vecino, de 30 años, que fue detenido esa misma tarde en su casa, cercana al templo, tras devolver el botín. El autor del robo accedió al templo a través de un butrón hecho en una habitación adyacente a la sacristía.
Gracias a la información que los vecinos proporcionaron a la Policía Nacional sobre un hecho ocurrido con el mismo 'modus operandi' 10 años atrás, y a que el autor del mismo acababa de salir de prisión, además de las imágenes aportadas por una empresa de alarmas, la policía localizó al ladrón, confesó, lo detuvieron, fue puesto a disposición judicial y actualmente se encuentra en prisión.
Además de robar las joyas, la imagen de la Virgen sufrió varios daños, en concreto la rotura de varios dedos y desperfectos en los brazos y las piernas. Presentaba también signos de que habían intentado quitarle la corona, aunque no lo consiguieron.
El obispo, José Manuel Lorca Planes, se desplazó el mismo viernes a la parroquia de Churra para conocer lo sucedido. «Es para mí un dolor muy grande contemplar este asalto al templo y el daño realizado a la imagen de Nuestra Señora de la Encarnación», indicó tras su visita.
El delegado del Gobierno resaltó ayer en la parroquia de Churra que, con este caso, «no solo estamos hablando de un delito contra el patrimonio, estamos hablando de un delito contra los sentimientos religiosos, contra las convicciones más íntimas de las personas».
Por este motivo, añadió que «si el que la hace la tiene que pagar siempre, el que la hace contra determinados sentimientos, merece un reproche superior».
Bernabé felicitó a la Policía Nacional «por el extraordinario trabajo que ha hecho porque en cuestión horas quedó resuelto el delito».