El presunto asesino de Barcelona amenazó con disparar a una agente de policía si era delatado
Roger L. S. advirtió asus dos rehenes de que se mantuvieran calladas cuando recibieron el alto al circular por un carril bus de la Gran Vía de Murcia
Juana Martínez
Lunes, 10 de abril 2023, 10:15
La fuga del presunto responsable del asesinato en Canovelles (Barcelona) de un instructor de tiro podría haber acabado en tragedia en Murcia, según relatan los dos policías nacionales que le detuvieron en la estación del Carmen tras obligar «a punta de pistola» a dos chicas a trasladarlo hasta la ciudad. Se desconoce el motivo que le hizo decantarse por Murcia para huir del lugar del crimen. Roger L. S, de 19 años, intentó ser militar pero fue descartado.
Debido a su desconocimiento de Murcia se equivocaron y acabaron en el carril bus de la Gran Vía. Ahí fueron interceptadas por una agente de policía local que patrullaba sola en una moto. Ante las preguntas de la municipal, las jóvenes mintieron alegando que se habían equivocado. No la alertaron porque temían por sus vidas. «Si decís algo os mato a vosotras y a ella», aseguró el presunto asesino para lograr su colaboración. «Fueron muy valientes y lograron mentir a pesar del miedo», destacan desde el cuerpo nacional.
Una vez se bajó del vehículo, una de ellas alertó al 091. Eran las 8 de la mañana del domingo, llevaba huido desde las 19.30 del sábado. «Desde ese momento movilizamos todos los recursos disponibles, en total unos 30 agentes, que se desplegaron buscando al sospechoso con las características físicas que nos habían descrito. Lo que denominamos una 'operación jaula'. Además, el individuo les había indicado a las chicas que iría a la estación de autobús», relata Héctor López, uno de los agentes de la Unidad de Prevención y Reacción encargado de su detención.
López y su compañero Jesús Marín lo redujeron en la estación del Carmen, cuando el fugitivo se encontraba en la sala de espera. «Es el peor escenario que se te puede dar como policía. Hay una persona armada, que ya ha matado, en una sala llena de gente. No podíamos sacar la reglamentaria por mucho que lo tuviera en mi línea de tiro porque había unas 30 personas que se iban a empezar a poner de pie. No podíamos arriesgarnos a que hubiera un tiro», sostiene el policía.
«No tenía licencia de armas»
«Lo que hicimos fue separarnos tácticamente para ir a por él, que estaba en un banco del fondo. Yo me aproximo por la izquierda y Jesús por la derecha. Siempre estoy manteniendo el contacto visual, por lo que en el momento que nos percatamos que fue a sacar la pistola nos tiramos rápidamente a por él. Luchamos cuerpo a cuerpo, que era la única opción que teníamos y conseguimos que se le cayera el arma y reducirlo», continúa López. Antes de su arresto no había comprado ningún billete de tren. Apenas había pasado media hora desde el inicio de la alerta.
«Llevaba una pistola, un revólver y bastante munición que había robado del club de tiro. No tenía ni licencia de armas», detalla Marín. «Cuando lo arrestamos nos preguntó porqué no le habíamos disparado, y nos dijo que él no hubiera dudado en hacerlo contra nosotros», confiesa. Las dos víctimas fueron atendidas en comisaría, y dejaron el coche para la inspección técnico-policial de la científica. El detenido pasará hoy a disposición judicial.