Los colegios de Murcia reciben un lavado de cara antes de afrontar el último tramo del curso escolar

Los escolares de la ciudad de Murcia afrontan desde esta semana el último trimestre del presente curso escolar, un año lectivo que terminará entre el 26 y el 28 de junio en función del nivel de enseñanza en el que se encuentre matriculado cada alumno.

Aprovechando las vacaciones por la Semana Santa y las Fiestas de Primavera, desde el Ayuntamiento han puesto a trabajar a una brigada de operarios que se han encargado de realizar mejoras y obras de mantenimiento en 18 centros educativos. De ellos, una decena se encuentran en pedanías. Los trabajos los ha canalizado la Concejalía de Educación y Patrimonio, que ha invertido más de 150.000 euros en realizar las obras previstas.

Al respecto, el edil Rafael Gómez explicó a 'La Verdad' que «las grandes reparaciones se acostumbran a realizar durante los meses de verano porque es cuando hay más tiempo para trabajar. Sin embargo, siempre se intentan aprovechar los periodos vacacionales para atender otras cuestiones de menor envergadura». Los trabajos que se han llevado a cabo han sido muy variopintos. De esta manera, en unos centros se ha colocado pavimento de caucho, en otros se han realizado reparaciones eléctricas y en algunos se han hecho tareas de pavimentación o pintura.

La instalación de fuentes y de tuberías o el arreglo de estas últimas también son trabajos que se han llevado a cabo. Desde la concejalía también apuntaron que ha habido centros en los que se han bajado algunos techos y otros en los que en las últimas semanas se ha acometido una renovación de la instalación eléctrica colocando en algunos colegios bombillas tipo LED. Dentro de la capital, los centros que han recibido mejoras fueron los de Nuestra Señora de la Paz, Mariano Aroca, Los Álamos, Fernández Caballero, Juan XXIII, Luis Costa, Félix Rodríguez de la Fuente y Vistabella.

Por lo que se refiere a las pedanías, los trabajos de acondicionamiento más destacados se llevaron a cabo en los colegios La Cruz, de El Campillo; Arteaga, de Sucina; Nuestra Señora de los Ángeles, de El Esparragal; El Molinico, de El Palmar; Sagrado Corazón, de Zeneta; Nuestra Señora de las Mercedes, de Puebla de Soto; Juan de la Cierva, de Casillas; Francisco Sánchez Matas, de Aljucer; y Santiago El Mayor.

En algunas ocasiones fueron los propios centros los que pusieron al Ayuntamiento sobre la pista de las mejoras que necesitaban, pero el mecanismo más habitual que se sigue para decidir qué hacer y dónde actuar lo articula el equipo municipal de construcciones escolares.

Sus responsables visitan todas las semanas los distintos centros que se encuentran en la ciudad del Segura y elaboran informes en los que recogen las mejoras que son más acuciantes realizar en cada caso.

Cuando el aviso lo trasladan desde los centros, los técnicos de este servicio se desplazan para comprobar sobre el terreno la urgencia de la solicitud recibida y, si lo entienden oportuno, elaborar el proyecto necesario para realizar los trabajos demandados.

Otro centro que ha recibido mejoras durante las últimas semanas ha sido el colegio de Los Garres. En este caso, las tareas llevadas a cabo han consistido en la reparación de las ventanas. Para este trabajo una subvención otorgada por valor de 6.000 euros por parte de la Dirección General de Centros Educativos ha aligerado el coste de las obras.

Además, la junta municipal de la población también ha participado económicamente en esta tarea acometiendo para ella una inversión que roza los 5.000 euros.