El helicóptero cuenta con un sistema de geoposicionamiento para localizar exactamente los focos. Ayer hizo una demostración sobre el río, a la altura de la Fica.

Guerra aérea contra el mosquito tigre

Sanidad vuelve a incidir en la necesidad de la colaboración ciudadana para acabar con esta plaga. Un helicóptero y dos drones permiten detectar focos en zonas de difícil acceso y realizar fumigaciones localizadas

María José Montesinos

Miércoles, 18 de mayo 2016, 02:03

A grandes males, grandes remedios. Y de los más modernos. El mosquito tigre, peligroso no solo porque sus picaduras son más molestas que las de los 'cúlex', sino porque puede ser transmisor de enfermedades graves, está ya extendido por casi todo el municipio. El Ayuntamiento sigue contando con recursos propios dentro del servicio de Zoonosis de Veterinaria, y continúa fumigándose al estilo tradicional, conocido como 'Rambo', porque los operarios van con unos cañones que lanzan la piretrina termonebulizada. Pero la aparición de esta nueva especie de mosquito -'Aedes Albopictus'- ha hecho necesario externalizar parte del servicio y aplicar nuevas tecnologías que luchan contra el mosquito tigre desde el aire con la ayuda de helicópteros y drones. La contrata se adjudicó a la empresa Lokímica por 63.000 euros, que ya tiene experiencia en este tipo de tratamientos en ciudades como Barcelona, Alicante, Valencia, Palma de Mallorca y Almería.

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  • euros fue la cantidad por la que la empresa Lokímica se adjudicó la contrata

  • litros de insecticida lleva el helicóptero para fumigar a razón de uno o dos litros por hectárea

El alcalde de Murcia, José Ballesta, junto con el concejal de Deportes y Salud, Felipe Coello, presentó ayer todo el arsenal con el que se va a luchar «para controlar esta plaga».

El jefe de servicio de Sanidad, Eduardo González, explicó que «el helicóptero no va a salir todos los días. Hará un vuelo diagnóstico , siempre en horario diurno, para localizar focos. La ventaja es que desde el cielo ves lo que no se ve en tierra, esa balsa que está sin cuidar, la piscina cuyos titulares solo vienen en agosto o la rambla que recoge escorrentías y es foco de mosquitos».

El piloto Noé García, gerente de la empresa Lokímica, explica que el uso del helicóptero tiene una importante ventajas sobre la avioneta: el vuelo estático, es decir, puede fumigar con el aparato parado, no así la avioneta. «La distancia de altura a la que aplicamos el insecticida está 10 metros sobre el terreno, aunque la aeronave tiene un techo de 8.000 pies, que es el equivalente a 2.500 metros de altura. Pero las aplicaciones, para una mayor precisión, se realizan siempre de 10 metros para abajo. El aparato tiene tres horas y media de autonomía y lleva una carga de combustible de 270 litros. Además, en la panza del helicóptero va una cámara con 600 litros de insecticida, que se esparce a razón de entre uno y dos litros por hectáreas».

La otra novedad es que se van a utilizar dos tipos de drones. Uno que lleva incorporada una cámara para la localización de posibles focos de difícil acceso para prevenir y actuar, y otro dron, que lleva un depósito para el insecticida. Este tipo de dron pueden fumigar entre 1 y 2 litros de producto por hectárea, y va provisto de un depósito con capacidad para 20 litros. El tiempo de autonomía está en torno a la media hora. La ventaja es que puede llegar a lugares de difícil acceso.

La nueva metodología evita las fumigaciones indiscriminadas masivas, -lo que supondría un perjuicio tanto para la salud humana, por la acumulación de insecticidas, como por un sobre uso que generaría resistencia al insecto- para centrarse en la localización e identificación de posibles focos. Así, por ejemplo, la geolocalización de los focos en la huerta, básicamente, a través del dron, es que permite realizar el tratamiento en zonas inaccesibles, como una rambla, donde los técnicos no pueden llegar con los vehículos habitualmente.

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Está previsto que hoy mismo se realice el vuelo diagnóstico en helicóptero para una primera inspección aérea de los posibles focos, lo que permitirá su posterior tratamiento y seguimiento. Se sobrevolará la Costera Sur, para detectar ramblas con acumulaciones de agua, balsas de riego y piscinas particulares que pudieran estar abandonadas.

Tanto el alcalde como el concejal de Deportes y Salud insistieron en que «por muchos recursos y mucha tecnología, si no tenemos la colaboración de la gente en sus viviendas no vamos a hacer nada. Cada uno -incidió Ballesta- es responsable en su parcela, en su tahúlla o en su propiedad». Y es que el mosquito tigre, que fue detectado por primera vez en el municipio en 2011, no crece tanto en grandes superficies de agua como en espacios pequeños y aislados, desde una macetas hasta un escape de agua. De hecho, el alcalde informó de que «solo es posible combatir esta plaga con la colaboración vecinal, ya que el 90% de los focos de mosquitos se encuentran en propiedad particulares.

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Avisos al 968 247062

El Ayuntamiento de Murcia ha lanzado una campaña de concienciación, titulada 'Contra el mosquito tigre luchamos todos' para sensibilizar a los vecinos del municipio sobre la importancia de alertar al Servicio de Veterinaria y Zoonosis ante la aparición de un foco, tanto de manera presencial, como a través del teléfono 968 247062 y el correo electrónico veterinaria.sanidad@ayto-murcia.es

«Quiero transmitir -finalizó Ballesta- que los murcianos están en las mejores manos y con los mejores medios técnicos que hay en España y se va a hacer en Murcia todo lo que se hace en cualquier parte del mundo para tratar esta plaga con profesionalidad y total dedicación». En este sentido, se comprometió a que «vamos a estar al teléfono y al correo electrónico para que cualquier incidencia pueda ser tratada a través de ese medio o de las redes sociales de forma inmediata.

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