«En catástrofes como la de Turquía, cada minuto perdido puede suponer una vida perdida»
El sanitario del 061 y vicedecano de la UCAM, Manuel Pardo, viaja al sur del país otomano en el primer destacamento que envía la ONG Bomberos Unidos Sin Fronteras desde Madrid para ayudar en las labores de rescate y salvamento a víctimas del seísmo
Manuel Pardo no se lo pensó cuando este lunes, a primera hora de la mañana, recibió un aviso reclamando su incorporación al primer destacamento de una docena de efectivos de la ONG Bomberos Unidos Sin Fronteras (Busf) que viaja a Turquía. Este primer contingente realizará labores humanitarias y de rescate, tras el terremoto de 7,4 grados en la escala de Richter, que ya ha dejado más de 2.400 víctimas mortales. Pardo, sanitario murciano del 061, voluntario de la ONG desde hace varios años y vicedecano de la Universidad Católica San Antonio de Murcia (UCAM), se puso en carretera en cuestión de minutos para ofrecer de forma solidaria toda su experiencia en las situaciones de catástrofes en las que ha participado, como en Filipina, República Dominicana, Mauritania, Uganda y la India.
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«Tenemos un grupo de activación en el que hay que estar disponible en unas cuatro horas desde el aviso, porque solo tenemos 72 horas de margen para tener opciones de salvar a las personas atrapadas», explica el sanitario mientras viaja en coche a Madrid. Cuando se produjo el terremoto el domingo por la noche, los responsables de la ONG establecieron un destacamento para trasladarse hasta el país. A Pardo le llamaron este lunes por la mañana y le dijeron que estaba seleccionado para el equipo, compuesto por sanitarios, bomberos rescatadores y guías caninos con perros adiestrados para la búsqueda de supervivientes. El avión que les lleva a Turquía salió a las 18 horas desde el aeropuerto Adolfo Suárez, y la previsión es que lleguen este lunes por la noche.
«En las catástrofes como esta, cada minuto perdido puede suponer una vida perdida. Estamos dentro de las primeras 72 horas, pero vamos a llegar a las 24 horas del inicio del terremoto, y ya hemos perdido un día de los tres primeros que tenemos como tope. El objetivo principal va a ser buscar con los perros de rescate a personas que todavía estén vivas, haciendo una primera asistencia en urgencias para rescatarlos e intentar que sobrevivan. Después entraremos en una segunda fase, la de postemergencia, asistiendo a la población para intentar evitar que haya un segundo pico de fallecimientos», afirma Pardo.
En las intervenciones sanitarias de emergencia en catástrofes, y específicamente en el caso de los terremotos, el trabajo del sanitario es el de salvar vidas y dar prioridad a aquellos heridos que tienen opciones de sobrevivir. «Cuando llegamos a una persona que está muchas horas en una estructura colapsada, puede tener heridas directas del derrumbe, o alteraciones de su estado de salud debido a haber estado atrapado durante horas o días, por lo que puede sufrir deshidratación, malnutrición y algunas otras patologías».
Protocolos de actuación por fases
El protocolo que se sigue comienza con la comunicación con las autoridades del país afectado para saber cuál es el plan de emergencia que han establecido y ubicarse en las zonas que ellos ya hayan delimitado como necesarias. A partir de ese momento, el equipo trabaja por fases.
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«Hay una primera parte con los perros de rescate que van a intentar rescatar o encontrar a personas que estén con vida; luego con el resto de equipos de bomberos se intenta establecer vías de acceso y evacuación para las víctimas que se evalúan y evacuan del edificio. A partir de ahí, empezamos con la asistencia sanitaria de los heridos», desarrolla el voluntario de la ONG. Además del trabajo con las víctimas, su labor pasa también por dar seguridad sanitaria a los bomberos y al sector de la población que haya sufrido daño directo o indirecto.
«El número de muertos crece exponencialmente»
En el caso del terremoto que ha sacudido el sur de Turquía, a tan solo 60 kilómetros de la frontera con Siria, Pardo asegura que la situación que se van a encontrar será dramática, ya que las noticias que le están facilitando indican que el número de víctimas mortales crece exponencialmente. «La información ahora mismo es muy inestable, porque cuando colapsa un país de esta manera, los datos cambian cada hora». Por último, el sanitario del 061 apunta que otro de los objetivos que tiene esta unidad, cuya intervención se prolongará durante unos diez días, es el de evaluar la situación para organizar otras posibles intervenciones casi de manera inmediata, «y que ese grupo salga ya del destino con información de primera mano», concluye.
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