El restaurante del Parque Torres de Cartagena garantizará la accesibilidad y la «gastronomía de calidad»

La reforma del Parque Torres y la apertura de su restaurante, en el cerro de la Concepción, será una realidad de la que podrán disfrutar cartageneros y visitantes a finales de 2025. Esa es la previsión del equipo de gobierno de Noelia Arroyo, que aprobó este miércoles el proyecto definitivo de obras de mejora del denominado edificio de usos múltiples del Parque Torres.

Se trata de una «intervención de mucho respeto, que mantiene el equilibrio entre la protección paisajística, cultural y del patrimonio con las necesidades del futuro establecimiento hostelero», dijo la alcaldesa en la presentación a los medios de comunicación de este proyecto valorado en 730.000 euros, con cargo a fondos europeos, que ya cuenta con el visto bueno de la Dirección General de Bienes Culturales de la Comunidad Autónoma.

Las actuaciones están encaminadas a la recuperación del restaurante del parque, que cerró sus puertas en el año 2005, y a mejorar sus accesos con la construcción de un ascensor integrado para facilitar la entrada a dicho establecimiento y a la parte alta del Auditorio Paco Martín.

En concreto, Arroyo explicó que los trabajos consistirán en la rehabilitación integral del edificio, eliminando añadidos innecesarios para recuperar su identidad histórica, y en la creación de una terraza panorámica para que los visitantes puedan disfrutar de «unas vistas incomparables de nuestra bahía y del casco histórico». Por último, abordará la accesibilidad universal con la integración de un ascensor que permita a las personas mayores y con movilidad reducida disfrutar de este espacio sin barreras.

En el proyecto de recuperación del restaurante se va a intervenir en una superficie de 748 metros cuadrados, distribuidos en dos plantas. En la inferior, de 406,90 metros cuadrados, las actuaciones se centrarán en la sala cubierta, el voladizo, la terraza, las jardineras, el ascensor y la pasarela. Y en la superior, de 341,30 metros cuadrados, estarán destinadas a una terraza, escalera, elevador, ascensor y pasarela, combinando nuevas construcciones con reformas de estructuras anteriores que aseguren un «diseño funcional, accesible y respetuoso con el entorno histórico del Parque Torres».

Paralelamente al desarrollo de esa segunda fase de obras, el Ayuntamiento prevé sacar a licitación la explotación del restaurante y cafetería, donde también esperan celebrar eventos. Al respecto, Arroyo aseguró que ya hay «empresarios interesados» para ofrecer una «experiencia gastronómica de máxima calidad» y convertir este espacio en «uno de los mejores escaparates del puerto de Cartagena». En cualquier caso, el Ayuntamiento establecerá criterios para que pujen proyectos gastronómicos de excelencia que conviertan este espacio en un referente culinario regional.

Con esta anticipación, el adjudicatario podrá participar en algunas de las decisiones sobre la ejecución del proyecto, según indicó la alcaldesa. «Será un paso más para consolidar a Cartagena como un destino muy completo, donde la historia, la cultura y la cocina están marcadas por la excelencia», apostilló Arroyo.

La previsión inicial del Ayuntamiento de Cartagena es que las obras, con un plazo de ejecución de siete meses, y tres meses previos de procedimiento burocrático, finalicen el próximo año. Sobre la accesibilidad de los vehículos al Parque Torres, la alcaldesa indicó que «los técnicos estudian las fórmulas de reserva de aparcamiento, pese a las dificultades existentes por la limitación de espacio».

La primera fase de obras en el Parque Torres para mejorar la accesibilidad y crear nuevas rutas de acceso están en su «recta final», indicó este miércoles la alcaldesa, Noelia Arroyo, durante la presentación del proyecto de recuperación del restaurante.

Se trata de cinco actuaciones incluidas también en el Plan de Sostenibilidad Turística en Destino de Cartagena, con una inversión de 363.630 euros con cargo a los fondos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia 'Next Generation' de la Unión Europea (UE) y un plazo de ejecución de cuatro meses desde su inicio a mediados de septiembre.

Las actuaciones consisten en la instalación de rampas accesibles, elevadores y salva- escaleras para conectar con los aseos y ascensores del Auditorio Paco Martín, así como la renovación de pavimentos y la conexión con el casco histórico.

«Hemos priorizado los itinerarios peatonales que unen el cerro de la Concepción con la Catedral Vieja, y el Teatro Romano con la Plaza San Francisco para que el visitante pueda acceder tanto desde el Puerto como desde cualquier punto del casco histórico con un paseo muy agradable. El trazado desde el Bar Sol hasta el Parque Torres es muy similar al que hay desde el Icue hasta el Ayuntamiento, siempre y cuando no haya barreras», añadió Arroyo.

La reforma integral del Parque Torres, dividida en dos fases con una inversión cercana al millón de euros, forma parte de un proyecto «más ambicioso de revitalización de cerros históricos».

Este plan incluye la iluminación ornamental del Molinete, que se estrenó en las fiestas de Carthagineses y Romanos para dar mayor protagonismo a los restos arqueológicos, mejorar la seguridad y la eficiencia energética. También la creación de un parque urbano en el cerro de San José en colaboración con la UPCT, y los trabajos de consolidación de Despeñaperros, según la primera edil.

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