Las oposiciones municipales atraen a menos de la tercera parte de aspirantes en Cartagena que en 2017

Poco más de 500 candidatos se han apuntado a la oferta de empleo público con la que el Ayuntamiento pretende engordar en 153 el número de funcionarios, en plazas que actualmente ocupa personal interino. El número contrasta con los 1.700 aspirantes que se inscribieron para optar a una de las 42 plazas de auxiliar administrativo en 2017. Las academias especializadas en formación para afrontar estas pruebas son las primeras que han notado esta bajada. Ninguna de las grandes con actividad en Cartagena tiene en marcha cursos de preparación específicos, más allá de pequeños grupos para las pruebas de conserje. Si la hay para las pruebas de acceso al Servicio Murciano de Salud y para las oposiciones a auxiliar administrativo del Estado.

Solo 7 de las 1.660 personas que se apuntaron a las oposiciones de 2017 sin trabajar como interino en el Ayuntamiento accedieron a una plaza de funcionario el año pasado. Los otros 35 consolidaron con la obtención de un puesto permanente la tarea que ya realizaban. Ese mismo año tuvo lugar la provisión de cinco puestos de técnico de la Administración General del Estado. En aquel caso solo uno de los cinco puestos en liza fue para alguien sin experiencia previa en el Ayuntamiento de Cartagena. Se presentaron 199 personas.

Además, la tasa que hay que pagar para participar en las pruebas supera los 25 euros para las escalas inferiores. Para los grupos C-2 y C-1, que son las más comunes en los puestos que hay que cubrir, se mueve entre los 28 y los 33 euros, tal y como figura en la ordenanza fiscal reguladora de la tasa por derechos de examen u otras pruebas selectivas. Estas cantidades son significativamente mayores que las que se piden en otras oposiciones de la Comunidad y del Estado. Asimismo, en el Ayuntamiento nunca han ocultado que con estas pruebas se pretende estabilizar la plantilla dando preferencia a quienes ya trabajan en ella.

La competencia con otras administraciones también ha crecido. El número de oposiciones convocadas a nivel estatal, en las comunidades autónomas y en ayuntamientos de toda España se ha multiplicado. Además de ser más barato acceder, la entrada de personal externo está menos condicionada por la existencia de interinos que también se presentan y por el diseño de las pruebas para tener en cuenta su experiencia laboral.

En el caso de Cartagena, el concurso de méritos tiene influencia sobre el 40% de la nota final. El tiempo trabajado en el Ayuntamiento de se premia con 0,4 puntos por mes en nómina, mientras que el dedicado a tareas para otras administraciones se valora con 0,15.

La oposición vale el 60% del resultado final. Los aspirantes tendrán que hacer una prueba escrita con dos partes. Para empezar habrá un test y un examen resolución de un supuesto práctico relacionado con las funciones del puesto y las materias que se recogen en la parte específica del temario anexo a la convocatoria, a elegir entre al menos dos propuestas del tribunal.

El segundo examen será diferente según la categoría del puesto. Los de escalas superiores (A1, A2 y C.1) deben defender, en una prueba oral, un proyecto presentado en el momento de la inscripción. Para el acceso a plazas del subgrupo C2, vale con una prueba práctica relacionada con las tareas y funciones de la plaza convocada.

Todos los ejercicios de la fase de oposición serán eliminatorios. En la primera parte, el test le reportará al aspirante un máximo de 10 puntos y el supuesto práctico servirá para conseguir hasta 30. Quien no obtenga 20 quedará descalificado. En la segunda parte, se podrán lograr hasta 20 puntos. Con menos de diez no será posible seguir.

El Ayuntamiento se ha preocupado de dar publicidad al tipo de prueba y a la puntuación, para que todo el mundo sepa cómo funcionarán «Esa baremación está publicada en la página web municipal», explicó ayer el concejal de Personal, Manuel Mora. Su objetivo es completar las pruebas y resolverlas antes de que las elecciones municipales del 26 de mayo. Intentará hacerlo con la celeridad que faltó en el concurso-oposición de los 42 auxiliares administrativos. Las pruebas tuvieron lugar el 25 de junio de 2017 y el resultado del examen no se conoció hasta veinte días después. La lista definitiva, incluido el concurso de méritos se demoró hasta el otoño y la incorporación tuvo lugar hace menos de un año.

El número de aspirantes todavía podría crecer, ya que el plazo acaba el día 23. Sin embargo, es impensable nivelar la desproporción entre las solicitudes presentadas a este proceso selectivo y las de hace dos años.

Los 153 puestos sometidos al proceso de consolidación representan algo más del 10% de la plantilla municipal. De ellos 44 los ocupan funcionarios interior, 33 los cubren contratados interinos y 77 pertenecen al personal laboral indefinido no fijo. Por lo que respecta a las funciones, hay incluidas 59 plazas de administrativo, 30 educadores, 17 profesores de las escuelas infantiles, 15 trabajadores de las brigadas de mantenimiento (un encargado, un oficial, cuatro operarios tareas generales, cuatro para el litoral y cinco ayudantes), seis monitores deportivos y cinco ordenanzas.

Asimismo hay puestos sueltos en una docena de cometidos: dos trabajadores sociales, dos monitores de la Universidad Popular, un auxiliar técnico informático, un diseñador web, dos auxiliares de Protección Civil, dos ordenanzas, dos auxiliares educadores, dos suboficiales de Bomberos, un auxiliar de fotografía, un subinspector de la Policía Local un ingeniero agrónomo y un ingeniero agrícola.

Cuatrocientos aspirantes están citados el próximo lunes, día 21, para ser sometidos al tallaje, primera convocatoria del proceso de selección para incorporar 30 nuevos policías locales. A partir de ese día se les comunicará el calendario de pruebas teóricas, físicas y prácticas que deben superar para entrar.

Inicialmente, el número de agentes era 25, pero las jubilaciones previstas para este año han llevado a aumentar esa cifra. El objetivo es reducir el déficit existente de 80 agentes. Por eso se aprovechó la aprobación de una directriz de ámbito estatal que permite aumentar el número en función de las jubilaciones para hacerlo.

Manuel Mora admitió ayer que no será posible celebrar las pruebas selectivas para el ingreso de quince nuevos bomberos, como se previó hace un año y medio. «Nuestra intención es retomar la oposición de inmediato, aunque el proceso no finalizará durante esta legislatura», alegó el edil.