Los muros del radicalismo en Cartagena

En las dos primeras calles hay frases explícitas de ideología fascista, que demuestran un sentimiento de aversión, rechazo y hostilidad hacia el Islam y hacia los musulmanes. En las escritas en el muro del Club Santiago, junto a la residencia universitaria de la Politécnica de Cartagena y Campus Alfonso XIII, se puede leer en letras de color negro y verde: «España cristiana, nunca musulmana», «Stop Islam» e «Invasores = Violadores».

En esa misma calle, en un transformador de la luz, hay otra: «El 69% de las violaciones son de inmigrantes». Junto a esta hay un parque en cuyos muros está la que reza: «Stop inmigración». Están acompañadas de símbolos como la cruz celta, empleada actualmente por diversos grupos ultraderechistas, neonazis y supremacistas, y de la expresión «Deus vult», apropiada en los últimos años por los movimientos de extrema derecha para expresar una posición hostil y defensiva ante el Islam.

Muy cerca de allí, en la calle peatonal que entronca con la pista de patinaje y de baloncesto callejero, en la Pedro Martín Zermeño, hay una más en la que se ensalza la figura del dictador alemán Adolf Hitler. En color verde se puede leer: «Adolf Hitler vive en nuestros corazones». Y en la plaza Doctor García Marcos hay una esvástica con pintura negra, que después alguien tachó con espray rojo.

Las frases y simbología están de camino a la barriada del Sector Estación, donde esta semana unos estudiantes denunciaron un supuesto disparo a la ventana de su vivienda, donde tenían colgada una bandera republicana. La Policía Nacional descartó que fuera un impacto de bala, pero investiga lo ocurrido. Este es el mismo barrio donde reside el joven de ideología nazi acusado del ataque a la sede de Podemos en Cartagena con un cóctel molotov en abril. Hay pintadas contra él en la zona.

Las pintadas son los primeros síntomas, según los vecinos del casco antiguo, de una radicalización de los jóvenes, «que habría que atajar de inmediato» antes de que «se propague más por el centro histórico y el resto de la ciudad», según el presidente de la Asociación vecinal de esta zona, Tomás Sánchez. Exigen una investigación. La Policía Nacional sigue desde hace meses las actividades propagandísticas de pequeños grupos de jóvenes de extrema derecha y extrema izquierda.

El malestar también ha llegado a la UPCT. Fuentes de la Politécnica indicaron que limpiarán las pintadas en el menor tiempo posible. El Pleno del Ayuntamiento aprobó ayer una moción de urgencia presentada por Unidas Podemos, en la que censura algunos de estos episodios y «reafirma su compromiso contra la islamofobia y el racismo».