El cante que viste a La Unión de oro

Pistoletazo de salida a la 64 edición del Festival Internacional del Cante de las Minas de la Unión, que se celebra del 31 de julio al 9 de agosto en la localidad minera. El pueblo se transforma. Las calles se engalanan de todo aquello que tenga que ver con el certamen y los vecinos salen a sus calles a recibir a los forasteros llegados de todos los puntos de España.

El pasado jueves las calles ya rebosaban alegría. Cientos de personas cenaban en locales emblemáticos, como el vinagrero y la Bodega Lloret, poco antes de asistir al pregón de la 64 edición del festival, este año a cargo del actor Imanol Arias. A las ocho de la tarde se celebró uno de los actos más entrañables del certamen, la entrega de la Medalla de Oro que entrega el festival, que en esta ocasión se le concedió al Teatro Real. La Unión ha querido reconocer su firme compromiso con la difusión, promoción y dignificación del arte flamenco.

Entre el público, el cronista oficial de la ciudad, Gonzalo Wandosell, acompañado de su mujer, Patricia Canet. En su charla con el artista unionense Esteban Bernal ambos coincidían en destacar que, «durante el festival, la localidad se llena de alegría, de actividad, de movimiento y de una gran riqueza que viene aportada por todos aquellos que nos visitan». El cronista aseveraba con rotundidad: «En estos días, La Unión se viste de oro».

De oro, negro y lunares se vistieron para subir al escenario un grupo de alumnos y profesores del Conservatorio de Música de Cartagena. Ellos cerraron el acto de entrega de la Medalla de Oro, que fue recogida con «enorme cariño y satisfacción» por Ignacio García-Belenguer, director general del Teatro Real. Él destacó en su discurso el incondicional apoyo al flamenco. «Siempre hemos entendido que el flamenco es el gran arte español y que una institución como la nuestra debe albergarlo. Estamos convencidos que tiene cabida aquí y que el Teatro Real es el sitio especial donde debe estar el flamenco y lo llevamos con mucho orgullo».

Entrañable actuación en solitario de Rafael Piñana, un joven de 15 años que sigue la saga familiar. Posteriormente, actuaron a la guitarra Cecilio Vázquez y Salvador del Rocio, que tocaron dos tangos. Como colofón final se unieron a los artistas Caridad Gil y Mamen Baños al cante, en la interpretación de una guajira que desató los aplausos del público. La directora del conservatorio, María José Castaño, y el profesor Francisco Sánchez, no faltaron a la cita.

Entre el público, Leandro y Rosa Martínez, Josefa Sánchez, Vanessa Beltrán, Ana Dolores Carrión, Cristina Martínez, Natalia Pérez, José Antonio Sánchez Aarnoutse, Pablo Barrionuevo, Ana Escarabajal, José Antonio Chacón, José Asenjo y el presidente de So-La-Na, Aurelio Solana, quien recordó que ya son 7 años los que lleva adelante el proyecto de Authentic Flamenco, el ciclo de Flamenco Real, que supone un espacio de referencia para el cante, el toque y el baile dentro de uno de los grandes templos culturales de España.

El presidente de la Fundación Cante de las Minas, Joaquín Zapata, y el director del festival, Julio García, se mostraron «exultantes» ante unas fechas en las que la localidad se convierte en la «capital mundial del flamenco». Los dos recordaban, poco antes de comenzar el acto, que el festival no vive solo de las galas.

«Hay gente que no puede ir a las galas por diversos motivos y nosotros organizamos las madrugás flamencas que están abiertas a todo el mundo», señalaron. Cada noche se celebran en un local de la zona o en la avenida Joaquín Costa. Se trata de una experiencia que saca el flamenco a la calle y en la que participan centenares de aficionados.