La bocana de Cabo de Palos será un reclamo turístico con una plaza para eventos en mayo
El Ayuntamiento de Cartagena adjudica las obras de reforma a la empresa Audeca por valor de 308.212 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses
La Mesa de Contratación del Ayuntamiento de Cartagena da un nuevo impulso a dos de los grandes proyectos incluidos en el Plan de Sostenibilidad de Destinos Turísticos: la reforma de la bocana de Cabo de Palos y la recuperación de la antigua batería de costa de San Leandro. Las obras tienen un valor total próximo a 1,5 millones de euros, con cargo a los fondos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia Next Generation de la Unión Europea.
Sobre la reforma de la bocana de Cabo de Palos para convertir este abandonado espacio en una plaza diáfana, el proyecto acaba de recibir el informe positivo de Infraestructuras y ha sido adjudicado a la empresa Audeca, por 308.212 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses, según anunció ayer la alcaldesa, Noelia Arroyo. El proyecto, que ha sido consensuado con vecinos y empresarios de la zona, pretende recuperar como espacio urbano el Muelle de la Sal, abandonado con el tiempo y ubicado al final del Muro de la Sal.
LOS DATOS
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Muro de la Sal La reforma incluye actuaciones en una superficie total de 1.384 metros cuadrados para convertir la zona abandonada en un nuevo reclamo turístico.
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Intervenciones La plaza de 870 metros cuadrados, que será pavimentada y dará continuidad al actual paseo del puerto; el espigón; la iluminación de la zona; y el control del paso de vehículos, entre otros.
No obstante, la Asociación para la protección de Cabo de Palos, Procabo, solicitó a la Dirección General de Patrimonio Cultural que incluya el espacio portuario del Muro de la Sal, en Cabo de Palos, como bien inventariado «por su valor cultural y social» para garantizar su conservación.
Con este rango especial, la asociación pretende que el Ayuntamiento de Cartagena redefina el proyecto para remodelar el Muelle de la Sal, ubicado al final del llamado Muro de la Sal o Salero.
El área de actuación en la bocana del puerto comprende una superficie total de 1.384 metros cuadrados que se dividen en tres zonas. Por un lado, la plaza, de 870 metros cuadrados de superficie, que será pavimentada para dar continuidad al actual paseo del puerto. Por otro, el espigón, con una superficie de 400 metros cuadrados, en donde se añadirá un nuevo espacio de hormigón especial para ambientes marinos. Por último, en la escollera, de unos 115 metros cuadrados, se realizaría una actuación de regularización, estabilización, compactación y relleno de algunas zonas próximas al espigón.
El proyecto incluye la iluminación del espacio con la instalación de torres. Una de ellas será ubicada al final del paseo del puerto marcando el inicio de la actuación en la bocana. Además se plantarán palmeras, habrá un panel explicativo del entorno, se recreará una vagoneta y se añadirán plantas autóctonas y bancos de descanso.
Con el objetivo de evitar el tránsito no autorizado de vehículos en la zona, el proyecto prevé el control de los mismos frente a la lonja mediante pilonas automáticas, que solo darán acceso a suministros para restaurantes, la lonja, eventos puntuales y mantenimientos. Estas pilonas permitirán eliminar los actuales bolardos que se encuentran frente al paseo del puerto junto a la gasolinera.
Arroyo destacó que el objetivo de este proyecto es que «Cabo de Palos gane esta zona de paseo y esparcimiento, después de haber quedado relegada a aparcamientos». Según la regidora, con esta actuación «recuperamos e integramos la bocana con el resto del entorno portuario, haciéndolo compatible con el uso pesquero, y permitiendo su completa incorporación a los recorridos turísticos y culturales».
La rehabilitación de la batería de costa de San Leandro salió a contratación y la Mesa pidió a las dos empresas ofertantes que subsanara algunos errores en la documentación. Ayer presentaron la información correcta y queda pendiente adjudicar las obras en una próxima mesa una vez analizadas las propuestas técnicas y económicas, si no hay temeridades.
La regeneración integral de la batería proyectada por el arquitecto José Manuel Chacón contempla la adecuación de la fortaleza y su entorno, así como un futuro centro de interpretación de las fortificaciones. La previsión inicial es recuperar esta fortaleza del siglo XVIII que es bien de interés cultural, situada entre el Muelle de La Curra y la playa de Cala Cortina, para convertirla en «un centro de interpretación del sistema defensivo que componen las baterías que definen la costa de Cartagena», según anunció en su momento la alcaldesa, Noelia Arroyo.
El Ayuntamiento prevé recuperar también el exterior mediante trabajos de paisajismo. Sobre la restauración del interior, Arroyo aseguró que se ejecutará «de forma respetuosa y acorde con la normativa y legislación vigente respecto a las intervenciones sobre edificios protegidos».
