Las brigadas forestales están 'quemadas' por la falta de reconocimiento y conciliación

En la Comunidad Autónoma, actuaron en los terremotos de Lorca y las inundaciones por la Dana en Los Alcázares, así como en numerosos conatos que se han producido a lo largo y ancho de la geografía murciana, como el de este verano en El Valle. Los 300 efectivos de la brigada forestal contratados por la empresa concesionaria Orthem están en primera línea ante cualquier catástrofe natural, jugándose la vida.

Sin embargo, este colectivo lamenta que no se les reconozca su cualificación profesional como bomberos forestales, lo que se traduce en sueldos que no llegan a los 1.300 euros netos, al tiempo que acusan un malestar general por la falta de conciliación familiar por a largas jornadas de trabajo y no poder disfrutar de vacaciones durante la época de alto riesgo por incendios, del 15 de mayo al 15 de octubre.

«Cuando pensamos en bomberos forestales los imaginamos actuando en los bosques cuando estos son amenazados por el fuego, en Murcia los trabajadores que realizan esta importante labor subcontratada por la Comunidad Autónoma, en realidad son peones agrarios, por lo que tienen un convenio laboral muy por debajo de lo que les corresponde según sus tareas», explica Juan Blázquez, secretario de Salud Laboral y Medio Ambiente de CC OO, que traslada su enfado por los bajos sueldos que ostentan. «Quizás la ausencia de visibilidad en su trabajo evita el reconocimiento que merecen», subraya.

Como brigadas forestales también se ocupan del mantenimiento de los parajes naturales, desbrozando los caminos para reducir al máximo cualquier posible propagación de un fuego, desempeño que hacen durante la temporada baja de riesgo, pero también en la alta, cuando se supone que deben estar preparados para actuar de manera inminente, se queja uno de los brigadistas que prefiere mantener su identidad oculta. Las condiciones son extremadamente duras, afirma este brigadista con varios lustros de experiencia.

Así lo demuestra su intervención en el último incendio de Castellón. Trasladados en un pickup –camioneta– con el equipo completo e incorporarse durante 12 horas a las labores de extinción, varios brigadistas forestales de Orthem –pertenecientes a la Unidad de Defensa Forestal de la Región de Murcia (UDIF)– regresaron a base después. «El conductor también realiza esas labores de extinción», asevera.

Además, «la conciliación familiar en verano es imposible, lo que hace más difícil su labor», subraya Blázquez. «Deberían contar con al menos unos días para compartir con sus familias el periodo estival», agrega el sindicalista. Durante los cinco meses –de primavera y mayo– trabajan cuatro días seguidos y libran uno. «Si les ampliaran la plantilla con unos pocos brigadistas más, podrían darle un cambio de calidad al servicio y hacerlo más humano», esgrime Pedro Manzano, responsable de Relaciones Institucionales de CC OO.

Muchos se ven abocados a dejar el puesto presentándose a una oposición o por otro empleo que aúna su vida laboral con la familia más fácilmente. «No podemos planificar un viaje con nuestras familias; incluso, el día que nos compensan con un festivo, nos lo comunican con 12 horas de antelación, denuncia otro trabajador, que tampoco quiere desvelar su nombre, pero que apunta a la continúa localización después de la jornada de trabajo como otro motivo por el que también están 'quemados'.

«La adaptación de las condiciones laborales es una potestad de la empresa, que deberá analizar y estudiar las reivindicaciones de sus trabajadores y en su caso atenderlas», según fuentes de la Consejería de Medioambiente. «Desde el Gobierno regional nos hemos reunido en numerosas ocasiones con el comité de empresa y también con la empresa para trasladarles la situación».

Sin embargo, Comisiones Obreras asegura que todavía no ha podido reunirse con el consejero de Medioambiente para transmitirles sus inquietudes. La Comunidad insiste en que está haciendo todp lo que está en sus manos para que puedan ampliar su formación. «Desde 2019, y en base al acuerdo alcanzado entre la Administración regional y los sindicatos CCOO y UGT, la empresa está impartiendo el certificado de profesionalidad, que les permitiría obtener la consideración de bombero forestal, formación que se imparte en horario laboral», aseguran.

En cuanto a la conciliación, el Ejecutivo autonómico firmó con los sindicatos el acuerdo de consolidación de empleo y mejora de calidad, así como días de descanso entre jornadas, precisaron las mismas fuentes. LA VERDAD intentó recabar la versión de la empresa, pero no ha recibido ninguna respuesta al respecto.