Aumenta el malestar por la «desidia» en la gestión del Imas

Satse alerta de que, de las ocho plazas de fisioterapeutas que ha sacado el Imas, seis se ofrecen a media jornada. «Estamos hablando de centros como el Luis Valenciano, con cerca de 120 residentes, que tiene un fisioterapeuta a media jornada», advierte el sindicato. «Muchos son discapacitados y personas mayores con sus necesidades básicas sin cubrir. Es lamentable que el Imas, la Consejería de Política Social y la Dirección General de Función Pública permitan tener a 120 personas dependientes con un único fisioterapeuta que va tres horas cada día», denuncia el sindicato.

Igual ocurre en el centro para personas con discapacidad López Ambit, también en la pedanía murciana de El Palmar, con 90 residentes y un fisioterapeuta solo a un 40% de jornada, denuncia Satse, así como la residencia psicogeriátrica Virgen del Valle, con más de 90 residentes y un fisioterapeuta a dos tercios de jornada. Satse tacha de «terrible» la calidad de los cuidados que se prestan a los residentes de estos centros con esas horas de atención fisioterápica, cuando «lo ideal para atender correctamente a estos usuarios sería un fisioterapeuta a jornada completa por cada 40 residentes».

Satse denuncia la «dejadez crónica» que sufren los residentes y trabajadores de estos centros, que se «suma a la sensación de que sus dirigentes siguen mirando para otro lado, esperando que no les muevan demasiado hasta que lleguen las elecciones y que otro se encargue del tema». Desgraciadamente, «ya solo nos queda esperar al siguiente capítulo».

Por su parte, el sindicato CC OO convocó ayer una concentración a las puertas de la Consejería de Política Social por la no renovación de los 150 contratos de refuerzo para hacer frente a la Covid que, según denuncian también Satse y UGT desde hace semanas, «provocará una notable merma de la calidad de la atención que se presta en estos centros». Francisco Saura, de CC OO, pidió ayer «el cese o la dimisión» de la vicepresidenta y consejera, Isabel Franco, «si no sabe gestionar los servicios sociales». Saura coincidió ayer con el resto de sindicatos en que «la calidad del servicio en estos centros está cada vez más deteriorada y no sabemos lo que puede pasar ante cualquier tipo de emergencia. Parece que no hemos aprendido nada de la pandemia».

En este sentido, Franco aseguro ayer que el Imas «sigue prestando los servicios al cien por cien sin ningún tipo de carencia , aunque todo se puede mejorar con una programación y con una dotación presupuestaria en la que todos trabajemos». En general, Franco aseguró que «el mensaje que podemos lanzar a la sociedad es de tranquilidad».