El Supremo anula el nombramiento del presidente del TSJ porque no se motivó

Un año después de asumir el liderazgo del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Murcia, el magistrado Miguel Pasqual del Riquelme verá, en los próximos días, cómo se le aparta del cargo, al menos temporalmente. La Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Supremo avanzó ayer que ha decidido anular su nombramiento al entender que la motivación del mismo fue «insuficiente o defectuosa». De esta manera, los magistrados del Pleno de la Sala Tercera estiman, en parte, el recurso planteado por Pilar Alonso, magistrada de la Audiencia Provincial que compitió con Del Riquelme por hacerse con la presidencia de la judicatura murciana.

El nombramiento del magistrado Del Riquelme, en enero de 2015, estuvo rodeado de cierta polémica después de que un grupo de vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) acusaran al órgano de gobierno de los jueces de haberle entregado la presidencia del TSJ murciano pese a estar 1.160 puestos por debajo en el escalafón respecto a Alonso. Estos seis vocales llegaron a subrayar que el Consejo había discriminado a Alonso «por ser mujer» y advirtieron de que la decisión «bordea la arbitrariedad».

Alonso decidió recurrir el nombramiento de su compañero ante el Supremo y el Alto Tribunal le ha dado la razón doce meses después. Según explicaron fuentes judiciales, la Sala tomó la decisión por el voto de 18 magistrados contra quince. Otros cinco miembros del Pleno decidieron abstenerse de la votación por ser vocales del CGPJ, guardar relación con algunos vocales o por amistad con alguno de los implicados. Ellos ni siquiera acudieron a la deliberación.

Según explicaron fuentes judiciales, la magistrada Alonso también solicitaba al Pleno que, de aceptar su petición de que se anulase el nombramiento de Del Riquelme, se la nombrase directamente a ella para este cargo. Esta petición, sin embargo, fue rechazada por el voto de 28 magistrados frente a cinco.

El Supremo adelantó ayer un fallo que se plasmará en una sentencia en los próximos días y que se notificará directamente al presidente del TSJ. Según explicaron fuentes del Consejo, este permanecerá en el cargo hasta que reciba esa notificación, momento en el que cesará. La presidencia del TSJ será asumida, entonces, de manera circunstancial, por el magistrado con más años de antigüedad en el tribunal -podría recaer en el magistrado Julián Pérez Templado, que ya dirigió la justicia murciana durante años-.

El CGPJ deberá, entonces, volver a estudiar las propuestas de los tres magistrados que optaron a la presidencia del TSJ murciano -Del Riquelme, Alonso y Andrés Pacheco, el expresidente de la Audiencia Provincial, ahora ya jubilado- y razonar de nuevo una decisión. El Consejo celebra un Pleno cada mes y el próximo está previsto, de acuerdo a la agenda, para el 28 de abril, por lo que la decisión podría no hacerse esperar.

Largas trayectorias

Tras conocer la resolución, Pasqual del Riquelme aseguró que «valoro desde la más absoluta normalidad de nuestro sistema de recursos la decisión adoptada por el Tribunal Supremo de anular, por defectos en la motivación, el acuerdo del CGPJ que me nombró, hace ahora un año, como presidente del TSJ de la Región». Recalcó su deseo de «reiterar mi vocación de servicio a la ciudadanía y mi disponibilidad plena para seguir afrontando las responsabilidades derivadas de la presidencia de este tribunal superior si vuelvo a contar con la confianza mayoritaria del Consejo».

En enero de 2015, Del Riquelme y Alonso defendieron ante el CGPJ sus méritos y su programa para optar al cargo. El actual presidente desgranó un amplio programa con hasta 62 propuestas. Lleva 25 años de trayectoria en la magistratura. Alonso, que lleva 38, incidió en la importancia de que la administración cumpla con requisitos de «eficacia, agilidad y modernización». Ambos han estado ligados a la misma asociación, la Francisco de Vitoria.