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Así viaja un águila calzada desde Murcia hasta el corazón de África
ANSE y Aguas de Murcia marcan una hembra juvenil con un GPS para documentar su migración y proponer medidas de conservación
'Silvia' nació durante la primavera pasada en un nido instalado en un gran pino cerca del Puerto de la Cadena (Murcia), y ahora se prepara para pasar los meses fríos entre Mali y Burkina Faso. Sabemos dónde se encuentra este ejemplar juvenil de águila calzada y cómo ha llegado hasta el corazón de África desde el Parque Regional El Valle-Carrascoy gracias al marcaje del ave mediante un emisor GPS por parte de Aguas de Murcia y la Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE);ambas entidades desarrollan un proyecto científico con el objetivo de reunir datos sobre la biología de esta especie y proponer así medidas de conservación.
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El ave fue equipada con el radiotransmisor el 2 de septiembre y, hasta el inicio de su migración dos semanas después, la información de sus movimientos en tiempo real ha permitido delimitar su área de campeo: 3.500 hectáreas que incluyen no solo zonas forestales del parque regional, sino también espacios baldíos, como eriales y solares, en los márgenes del espacio protegido. 'Silvia' ha empleado como zonas de alimentación –en busca de conejos, reptiles y otras aves como gorriones, mirlos y estorninos– enclaves sin urbanizar en las pedanías de San Ginés, Sangonera la Verde, El Palmar, La Alberca y el entorno de Torreguil.
Para el biólogo de ANSE Jorge Sánchez, estos datos reflejan «la importancia para la biodiversidad de estas zonas intermedias entre los núcleos urbanos y los espacios naturales, así como la necesidad de adoptar medidas en zonas de aparente bajo valor ambiental, como los entornos de polígonos industriales. Por ejemplo, la corrección de tendidos eléctricos», explica a LA VERDAD.
'Silvia' campeó entre San Ginés, Sangonera la Verde, El Palmar, La Alberca y Torreguil antes de migrar
El primer gran viaje en la vida de 'Silvia' –en homenaje a la investigadora de la UMU y anilladora de ANSE Silvia Espín Luján, fallecida el pasado abril– se inició hace un mes. Estos son sus principales hitos:
Sábado 17 de septiembre. Exactamente a las 10.21, su instinto le hace desplegar las alas con decisión para abandonar el territorio materno. Sobrevuela el pie de monte de la sierra de Carrascoy por su cara sur, cruza en dirección sur hasta la Sierra de las Moreras (Mazarrón) y planea sobre Ramonete y el Lomo de Bas (Lorca), pero finalmente atraviesa casi longitudinalmente la Sierra de la Almenara para saltar a Almería por La Campana y Almendricos. A las 18.15 alcanza un pinar de repoblación del Poniente almeriense, donde pasa su primera noche lejos de casa.
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Domingo 18 de septiembre. 'Silvia' reinicia el viaje con puntualidad: a las 9.00 sobrevuela el mar de invernaderos de El Ejido y supera las sierras del litoral de Almería y Granada. Sobre las 16.30 llega hasta el entorno montañoso de la ciudad de Málaga y decide descansar allí.
Lunes 19 de septiembre. Las dos primeras jornadas de vuelo pesan en las alas y 'Silvia' afronta con calma su tercer día de aventura. Se lanza sobre las 12.00 y entra en la provincia de Cádiz para arribar a las 17.15 a Facinas, entre Valdevaqueros y Zahara de los Atunes. África ya se huele en el aire y miles de rapaces abandonan Europa desde el trampolín del Estrecho. La joven calzada murciana permanecerá allí tres días esperando a que las condiciones meteorológicas sean favorables.
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Martes 20 de septiembre. 'Silvia' parece decidida a cruzar hacia África y se dirige a Tarifa, pero una vez allí desiste tras dar varias vueltas. Sube hacia el norte y pasa el día en el entorno de Algeciras. Duerme en un bosque del barrio de Guadacorte, en el municipio gaditano de Los Barrios.
Miércoles 21 de septiembre. La rapaz sigue dudando y no avanza. Hace noche en una arboleda del río de la Miel, próxima a una zona residencial a las afueras de Algeciras.
Jueves 22 de septiembre. Hoy es el día. 'Silvia' vuela de nuevo al sur y hace una aproximación sobre las 12.20, pero no se atreve. Media hora después acomete el intento definitivo y abandona la Península Ibérica en la Punta de la Parra. Cruza el Estrecho de Gibraltar en un azaroso vuelo de 24 minutos que le lleva al puerto de Tánger, ya en Marruecos. «Este es uno de los momentos más críticos de la ruta migratoria debido al peligro que supone para las aves planeadoras sobrevolar el mar», recuerda Jorge Sánchez. Una vez en África, sigue la costa mediterránea marroquí, atraviesa las montañas del Rif y sobrevuela la ciudad de Tetuán para descansar cerca de Beni Buzra.
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La rapaz voló durante 23 días entre el Puerto de la Cadena y el Sahel; cruzó el Estrecho en 24 minutos
Viernes 23 de septiembre. 'Silvia' continúa hacia el sur: termina de cruzar el Rif, penetra en el Atlas Medio y se posa en un olivar cerca de Saïda (Argelia), en la cabecera del río Muluya.
Sábado 24 de septiembre. El viaje prosigue hasta alcanzar el Gran Atlas, pero no atraviesa la cordillera sino que la bordea en dirección este hacia la frontera entre Marruecos y Argelia.
Domingo 25 de septiembre. La incansable águila calzada parte desde la provincia marroquí de Figuig por el Sahara argelino de nuevo hacia el este hasta Mansoura, donde corrige el rumbo y vuela de nuevo hacia el sur. Deja atrás el corazón del desierto y la misteriosa cordillera Ahaggar, que se levanta desafiante en el inmenso páramo.
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Sábado 1 de octubre. Una vez en el Sahel, el automatismo salvaje empuja a 'Silvia' otra vez hacia el sur pero no llega a entrar en Nigeria; justo antes de cruzar la frontera toma rumbo oeste para establecerse cerca del río Níger, entre Burkina Faso y Mali.
Lunes 10 de octubre. La última señal recibida, «lo que indica que se mueve en una zona con poca cobertura de telefonía móvil a 2.500 km en línea recta de Murcia», señala Jorge Sánchez, que ha formado equipo con los técnicos de ANSE Nerea Martínez, Ángel Guardiola y Ángel Sallent, bajo la dirección del experto en aves rapaces Mario León y la supervisión científica de Juan Manuel Pérez –Universidad Miguel Hernández de Elche–. Las acciones de marcaje y seguimiento están autorizadas por la Comunidad Autónoma.
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Si sobrevive al invierno, 'Silvia' tratará de regresar a la Península Ibérica en primavera para reproducirse. Otro largo viaje, y de nuevo cargado con valiosa información científica.
'Silvia', en homenaje a la investigadora Silvia Espín Luján
El equipo científico que sigue la migración de una joven águila calzada entre las sierras de Murcia y el Sahel africano ha llamado 'Silvia' a la valiente rapaz forestal en homenaje a la brillante investigadora de la Universidad de Murcia Silvia Espín Luján, que falleció en abril después de luchar durante casi cinco años contra una grave enfermedad. Licenciada en Ciencias Ambientales en 2008, Silvia Espín trabajaba como investigadora posdoctoral en el Área de Toxicología de la UMU. Su brillante carrera científica la llevó a obtener el Premio Extraordinario de Doctorado y a realizar estancias de investigación en centros como el IREC-CSIC (Ciudad Real), la Universidad de Turku (Finlandia), el Centro de Investigación en Clima y Medio Ambiente en Tromso (Noruega) y el Centro de Ecología e Hidrología en Lancaster (Reino Unido). También mereció prestigiosos contratos de investigación, como las ayudas Saavedra-Fajardo y Juan de la Cierva. Con más de 54 trabajos publicados en revistas internacionales de alto prestigio en los campos de la ecotoxicología y la ecofisiología de la fauna silvestre, Silvia Espín destacó desde sus inicios por la calidad y cantidad de sus contribuciones científicas. «Sin embargo, su excelencia como investigadora quedaba completamente eclipsada por su calidad humana. Silvia se caracterizó siempre por su alegría arrolladora y contagiosa, su optimismo insólito para afrontar cualquier problema, su valentía y su espíritu de compañerismo. Todo le venía bien a esta mujer todoterreno, daba igual que la citases a las cinco de la mañana para anillar carboneros o que estuviéramos de vuelta al alba tras una larga noche muestreando chotacabras. Ella podía absolutamente con todo», recuerdan sus compañeros de ANSE. A las puertas de conseguir la estabilidad como investigadora de la Universidad de Murcia, Silvia Espín se incorporó al Grupo de Anillamiento de ANSE en 2020 como anilladora específica de aves en cajas nido, en el marco de un proyecto que ella misma dirigía y que trata de evaluar los efectos de la contaminación por metales pesados en poblaciones de aves insectívoras de la Sierra Minera de Cartagena-La Unión.
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