Tras la pista de cada gota de agua que llegue al Mar Menor

Este proyecto de I+D+i es una plataforma que emplea datos de modelos matemáticos y sistemas de monitorización de atmósfera, aguas superficiales y subterráneas para predecir los efectos de lluvias torrenciales e inundaciones en la amplia cuenca vertiente y su influencia en el estado ecológico del Mar Menor.

Se espera que esta plataforma tecnológica, desarrollada por el Observatorio del Mar Menor, funcione a pleno rendimiento y totalmente automatizada finales de año, explica a LA VERDAD Víctor Serrano, cuando esté disponible el 'orquestador':un programa informático que cruza los diferentes modelos disponibles y comprueba que todas las salidas y entradas de caudales son correctas.

«Hasta ahora nos resultaba imposible cuantificar los efectos de la entrada de agua y el comportamiento de elementos como las barreras vegetales, por ejemplo. A partir de ahora tendremos un sistema operacional que nos aportará cifras concretas y estaremos seguros de si sirven o no las medidas que se están tomando», aclara.

El nivel de detalle del sistema de modelización será tan alto que «representará con la máxima definición posible la realidad de la cuenca vertiente», informa el director del Imida.

Las aplicaciones del nuevo sistema de modelado «son muy diversas y permitirán predecir las afecciones que pueden llegar a provocar en el acuífero y en el Mar Menor los aportes de agua dulce, sedimentos y contaminantes que causan, así como los efectos asociados de contaminación, colmatación y alteraciones en la profundidad del agua», detalla la Consejería de Medio Ambiente, Mar Menor, Universidades e Investigación.

El consejero Juan María Vázquez destaca que «la finalidad es proporcionar criterios objetivos y científicos para diseñar actuaciones que nos permitan anticiparnos y tomar medidas que eviten o minimicen los efectos que causan en el ecosistema» eventos como una DANA. «Este sistema de modelización también ayudará a predecir los flujos hídricos y las dinámicas que se producen en los humedales o en el acuífero cuaternario del Campo de Cartagena, tanto en superficie como de forma subterránea», añade.

En este proyecto, desarrollado por el Observatorio del Mar Menor –que dirige el Imida–, participan, entre otros, el National Research Council-Institute of Marine Sciences CNR-ISMAR (Italia); los departamentos de Ingeniería Minera y Civil, y el de Ingeniería Química y Ambiental de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT); el Departamento de Ingeniería del Agua y Medio Ambiente de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV); empresas como Nologin e HydroGeoModels AG (Suiza); y la Fundación Instituto Euromediterráneo del Agua.

«Esta colaboración tiene como objetivo observar el ecosistema en sentido amplio, en especial en ecología y biodiversidad, con tecnología aplicada a la observación del mar, genética de recursos marinos, cambio global, eutrofización, contaminación y recursos pesqueros, entre otras materias», afirma Juan María Vázquez.