Radiografía de una crisis interminable
El Efesé es vulnerable y le falta orgullo para salir de situaciones complicadas, más allá de sus carencias en la zaga y la medular
«Nos tiene que doler un poco más de lo que nos duele». «Tenemos que ganar diez partidos para salvarnos, pero es que ahora mismo ... no estamos en condiciones de ganar ni uno». «Borja Jiménez ya no está. Ahora no hay excusas». Son algunas de las frases escuchadas en el FC Cartagena, dentro y fuera del vestuario, tras la debacle del pasado lunes contra el Mirandés (0-2). Todos esperaban una reacción en el debut de Luis Carrión en el banquillo y lo que vimos, sin embargo, fue un nuevo paso hacia el infierno. La caída del Efesé no se detiene. No toca fondo el conjunto albinegro. Y esta es la radiografía de una crisis interminable, que no vimos venir en octubre.
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En detalle
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1 MÁXIMA VULNERABILIDAD El Cartagena es el equipo menos fiable del campeonato. Con un soplido cualquier rival lo manda a la lona. Es muy vulnerable, especialmente cerca de su área. Los oponentes necesitan poco para crear ocasiones de gol ante el Efesé.
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2 SIN INTENSIDAD Los errores que comete el Efesé en momentos determinantes de los partidos, como penaltis absurdos o fallos groseros en zonas críticas, revelan una falta de intensidad alarmante. También hay miedo y bloqueo mental.
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3 FALTA CORAJE Y ORGULLO Más allá del juego lento y previsible de las últimas jornadas, a los futbolistas les está faltando coraje y orgullo para salir de esta crisis. A estos jugadores tiene que dolerle más de lo que le duele perder tantos partidos.
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4 BUSCANDO UN LÍDER No hay referentes en la plantilla. Cordero y Verza se fueron, Carlos David no juega y Rubén Castro no tiene ese perfil. Solo De la Bella puede ser un líder, pero en el vestuario no hay voces autorizadas.
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5 LA SEQUÍA DE RUBÉN CASTRO El ariete canario empezó como un tiro e ilusionó a todos. Pero se ha apagado en el peor momento. Solo ha marcado un gol en los dos últimos meses y cada vez se le ve más desconectado del juego. Ni remata ni se asocia con los demás.
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6 LA ÚLTIMA BALA EN EL BANQUILLO El debut de Luis Carrión no pudo ser más amargo. Se esperaba una reacción que no llegó y la bala del cambio de entrenador ya está gastada. Ya no habrá más espacio para pensar en un nuevo revulsivo en el banquillo.
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7 SILENCIO INOPORTUNO Belmonte y Breis han estado siempre sobreexpuestos al foco mediático y se han manejado de cine. Sin embargo, cuando más necesario es escuchar a los que mandan, se han autoimpuesto una ley del silencio inoportuna.
Máxima vulnerabilidad. El Cartagena es el equipo menos fiable del campeonato en estos momentos. Mientras Albacete, Sabadell, Zaragoza y Castellón se rebelan contra su negro destino, los albinegros se hunden. Con un soplido cualquier rival lo manda a la lona. Cerca de su área se equivoca mucho y todos le crean ocasiones de gol con muy poco a Marc Martínez, el portero más goleado de Segunda. El muro ha caído.
Sin intensidad. Los errores que comete el Efesé desde noviembre, cuando todo se torció en el partido ante el Girona y la buena racha se truncó para siempre, son terribles. Ya van demasiados penaltis absurdos concedidos en momentos cumbre de los encuentros y en las últimas jornadas se repiten los fallos groseros en zonas críticas. Todo esto revela una falta de intensidad alarmante. También hay miedo y bloqueo mental, como reconoció Carrión el lunes. «Tengo la sensación de que los jugadores tienen demasiado miedo a lo que pueda pasar», apuntó.
El conjunto albinegro se equivoca mucho cerca de su área y regala los partidos con fallos de envergadura
Falta coraje y orgullo. A los futbolistas les está faltando amor propio y una mayor dosis de compromiso para salir de esta crisis. Estos jugadores, afincados en su mayoría en San Pedro del Pinatar, no tienen un sentimiento de pertenencia arraigado y la inexistente atmósfera en el estadio, debido a la ausencia de público, también perjudica al Efesé.
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Buscando un líder. Nadie ejerce de capitán, más allá de que el brazalete lo lleve Andújar habitualmente. Carlos David no juega y sabe que no cuenta con el respaldo de los que mandan. Cordero y Verza se marcharon. Por edad debería liderar el vestuario Rubén Castro, pero no da el perfil. Solo destaca la personalidad de De la Bella. Muy poco.
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La sequía de Rubén Castro. El canario salía casi a gol por partido y se puso 'pichichi'. En la jornada 12 llevaba 8 goles. En los dos últimos meses, sin embargo, solo acertó frente al Sabadell. Su sequía afecta a un Cartagena que ya ni siquiera funciona arriba. RC7 participa cada vez menos.
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La última bala en el banquillo y un silencio inoportuno. Carrión es el tercer técnico de la temporada, por lo que está ya gastada la bala del cambio de entrenador. Pase lo que pase, hay que morir con el catalán, recién llegado al Cartagena. Belmonte y Breis, mientras, siguen callados. Justo ahora es cuando más necesario sería que hablaran.
Cierra la tabla junto al Alcorcón tras el triunfo del Albacete
La victoria de ayer del Albacete en Santo Domingo, donde el cuadro manchego se impuso al Alcorcón de Anquela (1-2) en un partido aplazado en su día por la borrasca Filomena, deja al Cartagena cerrando la tabla junto al equipo alfarero. Los de Carrión son vicecolistas, empatados a puntos con el último, que es el Alcorcón. La racha de los últimos cuatro partidos (1 de 12) ha terminado con el Efesé en el fondo de la tabla. Se veía venir.
Desde el año del descenso, en la campaña 2011-12, no se veía el Cartagena en el fondo de la clasificación. En Segunda B, salvo el lamentable curso de Sporto Gol Man (2014-15), siempre estuvo en los puestos altos de la clasificación. Para empezar a salir de ahí abajo (la permanencia solo está a un punto) tiene que reaccionar ya este domingo en El Molinón, donde le espera un Sporting que es quinto, a nueve puntos ya del ascenso directo y con el séptimo pisándole ya los talones. La Ponferradina tiene solo dos puntos menos que los asturianos.
Vienen los gijoneses de perder en Castellón (2-0) en un choque en el que Carlos Carmona, héroe albinegro en Alcoy, falló un penalti. Está necesitado el Cartagena, desde luego. Pero también el equipo que entrena David Gallego.
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