10 ideas para incrementar el valor de tu casa y venderla por un precio más alto

Una reforma puede aumentar considerablemente el precio de venta de un inmueble, especialmente cuando la vivienda se encuentra en mal estado o está ubicada en zonas muy demandadas y con escasa oferta. Es posible que en algunos casos los ingresos que se van a obtener de más no compensen la inversión que es necesario realizar, pero aun en estos supuestos existen trucos para dar un mejor aspecto a la casa y hacerla más atractiva a los ojos de los compradores sin gastar una fortuna.

En cualquier caso, los objetivos últimos deben ser que la vivienda destaque por encima de las de la competencia, que incluso con un precio de venta más alto merezca la pena decantarse por el inmueble y que el futuro propietario pueda imaginarla con facilidad como su propia casa, por lo que las reformas y cambios que se realicen deben ser lo suficientemente neutros como para ser del agrado de la mayoría de los posibles compradores.

¿Estás pensando en vender tu vivienda? Aquí van 10 consejos que revalorizarán tu propiedad y que además te permitirán venderla en menos tiempo:

Quienes buscan una vivienda reformada, o al menos para entrar a vivir, apreciarán tener que realizar el menor número de mejoras posibles, lo que evitará contratiempos y supondrá un ahorro de tiempo y dinero invertido en obras.

Una actuación imprescindible es reparar aquellos pequeños fallos en los que el comprador puede fijarse: interruptores que no funcionan bien, grifos con poca presión, puertas o ventanas que no cierran correctamente… Si además se invierte en reformas estructurales como renovar la fontanería o el sistema eléctrico, los posibles compradores agradecerán saber que compran un inmueble en el que, si bien 'habrá cosas que pulir', en lo esencial, estará en perfecto estado.

El cuarto de baño es una de las estancias de la vivienda que una mayor impresión causa, para bien o para mal, cuando se visita un inmueble a la venta. La reforma de un baño no tiene por qué resultar especialmente cara, y puede cambiar por completo la sensación que produce una casa.

Pero incluso si la reforma integral del baño escapa a tu presupuesto, se puede mejorar enormemente la apariencia del baño por poco dinero. Arreglar y pintar los muebles, o sustituirlos por otros sencillos y económicos o pintar los azulejos del baño y crear una nueva decoración neutra empleando madera y mimbre son solo algunos consejos para dar un nuevo ambiente a esta estancia.

Junto al baño, la cocina es el otro elemento de la casa en la que más se fijan los compradores. Una cocina cómoda y funcional no solo genera una mejor impresión, sino que mejora la calidad de vida. Como en el caso de los baños, si no se quiere entrar en una reforma a fondo de esta estancia, se puede optar por darle una nueva apariencia arreglando y pintando los muebles y azulejos, además de realizar una limpieza a fondo.

Si la vivienda se va a vender con los electrodomésticos, puede convenir renovar los más antiguos. Sustituir la cocina por placa vitrocerámica o de inducción y renovar la caldera o el termo eléctrico son también detalles que los posibles compradores sabrán apreciar.

El buen estado de las paredes y el suelo es otro aspecto que salta a la vista cuando se visita una casa en venta y que puede cambiar por completo la percepción. Arreglar los desperfectos en las paredes, pintar en colores claros e incluso renovar el suelo pueden dar una nueva vida a la vivienda.

Si hay algo que hemos aprendido a valorar tras la pandemia son los espacios amplios en casa. La vivienda no siempre permite hacer muchos cambios en la distribución, pero sí es habitual poder eliminar la separación entre la cocina y el salón para crear un espacio más extenso y luminoso o adjuntar una habitación a este último para hacerlo más grande, creando o no diferentes espacios.

Tanto la luz natural como la iluminación artificial son aspectos definitorios para decantarse por un hogar. Optar por unos visillos claros que potencien la entrada de la luz del sol en la casa y eliminar obstáculos innecesarios y el exceso de muebles proporcionarán una mayor luminosidad.

En lo que se refiere a la iluminación, añadir puntos de luz en aquellos lugares en los que se haga necesario y jugar con los espejos darán una mejor sensación a la casa.

Quien busca una nueva vivienda busca también espacio. Uno de los trucos que dará una mejor impresión a los compradores es vaciar los armarios lo máximo posible y ordenarlos antes de las visitas. Si se encuentran en mal estado, invertir en su carpintería dará un valor añadido a la casa.

En estos tiempos de altos precios de la energía, una característica que valorarán las personas interesadas en el inmueble es su eficiencia energética. Mejorar el aislamiento exterior, cambiar las ventanas por otras que eviten las pérdidas de calor y frío o sustituir el sistema de calefacción o agua caliente por otro más eficiente y económico serán detalles que el posible comprador tendrá en cuenta.

La domótica tiene multitud de funcionalidades que permiten también controlar y reducir los consumos y dan a la vez un mayor confort a la vivienda: desde la implantación de sensores con los que automatizar cada aspecto de la vida en el hogar hasta la colocación de hilo musical o una cerradura electrónica, el atractivo de estas mejoras puede superar con creces su precio.

Por último, pero no menos importante, convertir el inmueble en un hogar potencial a ojos de cualquier visitante pasa también por retirar todos los objetos personales y el exceso de muebles y sustituirlos por una decoración de estilo minimalista, que les permita verla como su futura nueva casa.

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