El balonmano cartagenero busca 3.000 euros para competir la próxima temporada

El equipo de balonmano de Cartagena, el CAB, necesita «liquidez inmediata» para poder competir la próxima temporada en la tercera categoría de este deporte: Primera Nacional. Las dos personas que han sostenido el club en la última década, Sergio Amat y su mujer, Sonia Busquier, corrían con el 20% de los gastos y han decidido echarse a un lado por «falta de motivación para seguir invirtiendo tiempo y dinero en este proyecto». Un grupo de padres, que encabeza la vicepresidenta Cristina Hernández, busca 3.000 euros para inscribir el equipo antes del 1 de julio.

El grupo que encabeza Hernández pretende convocar una asamblea con el resto de padres y conformar una nueva directiva. «La subvención municipal no llega hasta 2023 y no podemos quedarnos quietos», apuntó a LA VERDAD Hernández. El FC Cartagena, que apoya el proyecto asumiendo el coste de camisetas y desplazamientos, se ha comprometido a ayudar en la búsqueda de apoyos, de acuerdo a la vicepresidenta. Además de la inscripción, el CAB necesita «entre 6.000 y 8.000 euros» para cubrir el resto de gastos de la temporada, fundamentalmente de arbitrajes.

De momento, la solución más inmediata es inscribir el equipo, que en las últimas dos temporadas ha logrado la permanencia en Primera Nacional. Para ello buscan cien patrocinadores, «pequeñas, medianas y grandes empresas», para costear la inscripción. «Sinceramente, creo que no he podido hacer más por este club, incluidas las últimas actuaciones para aumentar las ayudas e intentar que este sueño no termine», ha escrito Amat, alma máter del proyecto, en una carta de despedida.

La actual vicepresidenta recordó a este diario que las bases están formadas por más de 200 niños y niñas. Optimista, Hernández cree que el campeonato infantil que se disputará en el Palacio de Deportes les ayudará a salir de esta situación.

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