Lágrimas de Valverde en el traspaso de poder a Enric Mas

Fue verse en otra piel, acicalado con traje oscuro, camisa blanca y corbata a juego, sin el maillot azul o la ropa deportiva al uso, y Alejandro Valverde rompió a llorar como un tierno infante. Es la primera vez en 18 inviernos que el murciano no sube al estrado como capitán del equipo de Eusebio Unzué. Se presentó el Movistar 2023 y hubo lágrimas en el traspaso de poderes. El 'Bala', ahora sí, es un ciclista jubilado.

Un vídeo recordó la longeva trayectoria del murciano y éste puso un nudo en la garganta de los asistentes al quedarse mudo, bloqueado por la emoción, se hizo el silencio respetuoso para el campeón que no volverá. Valverde se queda en el Movistar como enlace, asesor, elemento de cohesión o lo que quiera, y el liderazgo pasa a manos de Enric Mas, el segundo clasificado en la Vuelta a España.

El Movistar 2023 asoma sin el segundo patrocinador que pretendía Unzué para competir contra las grandes estructuras (UAE, Ineos, Jumbo), con el presupuesto conocido (unos 17 millones anuales), tres fichajes (el velocista colombiano Fernando Gaviria, el escalador portugués Rubén Guerreiro y el joven contrarrelojista vallisoletano Iván Romeo) y el equipo femenino comandado por la número uno mundial, Annemiek van Vleuten.

Durante 2022 ha merodeado el abismo por esa amenaza de descenso a segunda división por la falta de resultados y los puntos UCI que otorgan las clasificaciones de las distintas carreras. «Se vivieron momentos muy tensos al coquetear con el descenso y se salió adelante porque todos pusieron más de lo que tenían, el staff, los corredores, todos».

Abarca Sports, la empresa de Unzué que recibe el patrocinio de Movistar y lo distribuye entre los empleados del equipo, ha trabajado para sumar una empresa aliada al maillot y ha buscado financiación en las compañías españolas del Ibex 35 y en otros territorios, como Arabia Saudí, donde ha suscrito un acuerdo de colaboración con la federación ciclista del país. El dinero, de momento, no ha llegado.

Sin la paga extra de un nuevo patrocinador, el Movistar afronta una transición incierta. La ausencia de Valverde deja un hueco sideral en una formación que se acostumbró a los triunfos balsámicos (133 en toda su carrera). Pero el murciano ya no está y nada será igual a partir de ahora. «El relevo está en Enric Mas y el liderazgo también está en Enric. Seguiremos honrando la marca», expresó Eusebio Unzué.

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