Un militar fiel a la patria y a la Ruta de las Fortalezas

Baena está presente en cada detalle, dispositivo y modificación de un recorrido que desde 2010 hasta ahora ha contado con diversos cambios y matices con un único fin: el de velar por la seguridad de todos los participantes. Agradecido a sus diferentes mandos y compañeros, ese apoyo no solo le ha permitido ser partícipe de la organización, sino a la misma vez vestirse de corto y correr todas las ediciones. En tres ocasiones quedó campeón por equipos y en 2013 tocó techo quedando en la séptima posición de la general con un tiempo de 04.18.

Solo una vez faltó a su fiel cita con la Ruta. Y concretamente para cumplir con su cometido de la defensa del país, al ser destinado en una misión de paz a Mali en la lucha contra el terrorismo. Baena, por lo tanto, es una voz autorizada para hablar, desde entro, de cómo esta exigente carrera de 50 kilómetros ha evolucionado con el paso de los años.

«Como corredor puedo decirte que el principal cambio no solo es la implicación de muchísimos organismos, sino de la sociedad en sí y la llegada de muchos participantes de fuera de la Región de Murcia». En 2023, por ejemplo, 1.583 inscripciones de las 7.184 inscripciones recibidas, el 22%, correspondieron a ciudadanos de otras partes de España; fundamentalmente de Alicante, Madrid, Almería, Cádiz y Granada.

«También», destaca Baena, «ha evolucionado mucho la presencia de mujeres [un 26% de participación en 2023] así como de los clubes de atletismo en general. Pienso en la primera edición y en estas últimas y el crecimiento ha sido brutal. Además hay que tener en cuenta cómo ha mejorado la preparación de la gente: actualmente hay una gran variedad de prendas, entrenadores personales, zapatillas y rutinas de alimentación que suben el nivel».

Baena tiene en la memoria la primera edición. Fue el 17 de abril de 2010. La Ruta de las Fortalezas comenzó a las ocho de la mañana en la plaza de los Héroes de Cavite tras el izado de la bandera y un homenaje para honrar a los cuatro marinos fallecidos el viernes en Haití, entre ellos un cartagenero. «Tenía lágrimas en los ojos. La primera vez fue maravillosa, era una competición diferente. Entonces, parecías un bicho raro si salías a correr en pantalón corto».

Bajo su experiencia, Baena reconoce que la carrera es exigente, por sus subidas, bajadas y el terreno mixto entre la montaña y el asfalto. «Recuerdo la sexta edición, donde sufrimos muchísimo por el calor y un factor a tener en cuenta. Y cuando hicimos la versión ultra de 111 kilómetros, de enorme dureza».

Estas últimas semanas es habitual ver numerosos grupos de gente en los montes, como preparativo al evento del sábado 13. «Normalmente es bueno hacer un entrenamiento de cuatro meses con tiradas largas, rutinas, series... Se puede sufrir si no vas bien preparado. La cabeza a veces te dice una cosa y las piernas, otra. Llego un poquito corto, por un problema de hipertensión que me ha tenido casi un año parado. Mi idea es hacer un tiempo de cinco horas y media o seis horas, disfrutar y ya en otra ocasión intentar mejorar».

La organización publicó ayer oficialmente el recorrido con algunas novedades. Esta no se entrará al Arsenal y se suprimirá tanto la subida a Sierra Gorda como la arista entre Calvario y San Julián, una zona donde se registraron algunos problemas de acumulación de personas. Esta semana ya empiezan los primeros ensayos e inspecciones por el trazado, a fin de comprobar que todo está en orden. La idea es desplegar a más de cuatrocientas personas.

El viernes 12 es la recogida de dorsales en las proximidades del puerto, en horario ininterrumpido de 11.00 a 21.00 horas; y el mismo sábado 13 de 06.30 a 07.45 horas.