Un Odilo certero en ataque suma otra victoria en Oviedo

La entrada en pista del equipo local fue inmejorable. Arranque fulgurante y nueve tantos anotados en apenas tres minutos (9-2) que les ponían al comando de un cuarto que dominarían en su integridad. Alcanzarían los ovetenses una máxima en el período de +9 (20-11) aún con bastantes minutos por jugarse, merced a un prácticamente impecable juego interior donde no fallaban una. No obstante, poco a poco fue despertando de su letargo el conjunto cartagenero para limitar los daños e ir aproximándose. Así, con un parcial de 0-7 culminado con un triple sobre la bocina de Alberto Martín, dejaría casi en empate técnico a su conclusión el primer envite (20-18).

La tendencia del segundo cuarto se asemejaría más a los últimos minutos del anterior acto que a los primeros. Mandaba el OCB el grueso del cuarto, un poco a tirones, estirando la diferencia, mientras su rival hacía la goma, pero sin despegarse en ningún momento de la estela carbayona, y cada vez más cómodos. De hecho, las noticias no serían las mejores para los locales, pues un último minuto errático con malas elecciones, tanto en ataque como en defensa, propiciaría un cambio de tercio en el choque y que el Odilo Cartagena se fuese por delante a vestuarios (36-39). El lanzamiento exterior era una auténtica losa para el Alimerka Oviedo, que en la primera mitad tan solo supo convertir un intento (de Mikel Sanz) de los diecisiete intentados. Todo lo contrario que los de la ciudad portuaria, menos lanzadores, pero si más certeros con un 50% de acierto. Al inicio del tercer cuarto se seguía sintiendo a gusto el conjunto cartagenero, que contaría con diferencias de entre 5-7 puntos durante muchos minutos. Finalizó el cuarto 54-62 con un Odilo en continuo crecimiento.

Los albinegros se soltaron del todo en el último cuarto y se mostraron inquebrantables, liderados por dos de sus figuras, Van Eick y Ugochukwu. El Oviedo sumaba, pero para conseguir acercarse era obligatorio secar el ataque cartagenero, situación que nunca ocurrió a lo largo del último periodo. Finalmente, ya sin opción, la cuerda se estiraría aún más y el triunfo volaba para Cartagena por un resultado de 73-87. Victoria de quilates de un Odilo que prolonga su estado de gracia. Próxima parada: Burgos y la Copa de España, otra competición pa seguir soñando y continuar disfrutando.