Peter Greenaway: «El cine debería ser hecho por pintores»

Peter Greenaway, premio Honorífico del Festival de Cine Ibaff, afirmó en Murcia este sábado que no es un cineasta convencional, con 16 películas en su filmografía, entre ellas 'El cocinero, el ladrón, su mujer y su amante' (1989).

En una conferencia en el Edificio Moneo, presentada por el alcalde José Ballesta, que agradeció su visita y su contribución a la cinematografía europea, el realizador británico señaló, ante un nutrido grupo de espectadores, que el cine artístico europeo enfoca la mirada en la parte más especulativa del ser y está seguro de que convertir el cine en algo literario es un error.

Greenaway apuntó que el cine tiene un lenguaje muy complicado y recalcó la diferencia entre texto ilustrado y cine, citando a uno de sus pintores favoritos, Rembrandt, y la frase «no porque tengamos ojos sabemos mirar». Hasta los 35 años, Greenaway se dedicó a la pintura, «un arte que se remonta a 40.000 años atrás de algunas pinturas rupestres en Francia». En su afán provocador, dijo que la mayoría del público es «analfabeto visual» y lamentó el tiempo que pierde la gente intentando entender el lenguaje de la comunicación visual.

Intentó explicar que su cine tiene como prioridad la imagen, y que no necesariamente cuenta historias. En ese sentido destacó la importancia de crear cine sin hilo narrativo. De nuevo con Rembrandt en los labios, afirmó que la mejor pintura es la que no cuenta historias. Por eso cree que el cine debería ser hecho por pintores y no por realizadores y guionistas.

Para Greenaway, «el cine ha muerto, larga vida al cine», como tituló su 'masterclass' en Murcia, donde demostró su carácter más abierto, experimental y reflexivo, negando en cualquier caso la etiqueta de excéntrico que le adjudican.