La obra más kafkiana se afinca en el Valle de Ricote

En fase de preproducción, Chumilla situará la historia en el mundo mediterráneo y ya ha localizado, junto al director de fotografía italiano Alfredo Betrò, los escenarios entre palmeras y palmerales. «El lugar idóneo es el Valle de Ricote y los huertos en torno a Ulea, Ojós y Villanueva del Segura», cuenta; y aclara, para quienes no le conocen, que para él la Sierra Minera de La Unión y el Valle de Ricote son paisajes esenciales.

También está previsto rodar en Cehegín, donde han encontrado la casa ideal para las escenas de interior -Samsa pasa toda la trama encerrado en su cuarto- porque «mantiene los elementos originales de los años 30 o 40».

Con el plácet de los principales actores de reparto -«me hace mucha ilusión contar con actores de primera línea», reconoce-, está ya intentando encajar fechas para el rodaje con el murciano Enrique Martínez (Gregorio Samsa-'Goyo'), Emilio Gutiérrez Caba (padre de Goyo), Clara Sanchís (Celia y hermana de Goyo) y la colaboración especial del también murciano Daniel Albaladejo (José Martínez, el hombre de Correos). Y continúa en plena y frenética búsqueda de Gloria, la sobrina de Goyo, un papel principal que intenta cubrir con la ayuda de la Escuela Superior de Arte Dramático de Murcia (Esad) y la Unión de Actores. «Tiene que ser pelirroja o, al menos, de piel muy blanca y ojos claros para que sea creíble su parentesco con los otros personajes», detalla. Y avanza el director que su intención es que se pueda rodar en mayo, porque, «para que todos puedan coincidir y no tener que renunciar a nada, hacer una película es un encaje de bolillos».

«Un día, caminando por la huerta de Ulea cerca de mi casa, me fijé en los tristes efectos de la plaga del picudo rojo -un coleóptero invasor que se importó con las palmeras traídas de fuera con el 'boom' inmobiliario-, que está diezmando uno de los elementos más icónicos del paisaje murciano y mediterráneo (español, francés, italiano y griego), transformando el 'skyline' de las huertas sobre el río y dejando cadáveres descabezados de palmeras centenarias», reflexiona. Y lamenta: «El combate lo vamos perdiendo».

De ahí surgió el proyecto que ya tiene hilvanado; y con el objetivo de dirigir la mirada al valor de ese paisaje «a preservar» y sensibilizar sobre la importancia de «un mundo rural tan rico, en extinción por el propio devenir del mundo», para el que reclama «protección por parte de la Administración, que está contribuyendo a su destrucción».

En la libre interpretación del relato de Kafka, aunque fiel a su esencia, se compromete Chumilla-Carbajosa, el monstruoso insecto de 'La transformación' [traducción literal del título original] será un picudo rojo. «Enseguida me vino a la mente la imagen de Enrique Martínez y ahí surgió el germen». Y avanza que la película será un 'thriller' psicológico en el que las principales pulsiones humanas vuelven a estar presentes como grandes temas de la humanidad, aunque con un fin reivindicativo centrado en aprovechar esta «oportunidad maravillosa» para poner de relieve los «elementos etnográficos y paisajísticos del entorno del Valle de Ricote, no suficientemente conocidos».

En este proyecto en el que Chumilla se toma ciertas licencias, Goyo es un cartero, en lugar de un 'viajante de comercio', que, preocupado por un palmeral que agoniza, se transforma tras una noche de pesadilla en lo que más detesta, un picudo rojo.

El sello murciano de la película, que Chumilla espera que esté lista para su estreno antes de que acabe el centenario de la muerte de Franz Kafka y para llegar a tiempo a festivales como los de San Sebastián, Sitges y Valladolid, lo imprimen aún con más fuerza los integrantes del equipo técnico. Así, Juan Manuel Chumilla-Carbajosa contará con la colaboración de destacados profesionales, locales, como la coguionista Gracia Chumilla, el músico Salvador Martínez para componer la banda sonora; la directora de arte Carmen López, que es la diseñadora del vestuario de 'Meta Morfosis'; y la cartagenera Juana Bassat, directora de arte de la producción, en la que junto a Kinos Klan, productora del cineasta, participa también la productora Chester Media, de la que es CEO y socio fundador José Alberto Sánchez.

Pendientes aún de completar la financiación, esperan contar con ayudas del Ministerio de Cultura y las aportaciones económicas por las preventas a televisiones de la película, además de los recursos propios. La idea es contactar con la Film Commission de la Región, de la que confían que contribuya a agilizar las gestiones necesarias con las autoridades locales para facilitar el rodaje de determinadas escenas. Además, avisa a navegantes Chumilla-Carbajosa, recuerda que «la inversión en proyectos cinematográficos se está reactivando mucho por las desgravaciones fiscales (un 30%)» y alerta a las autoridades regionales que al País Vasco se están trasladando muchos proyectos «porque la desgravación en su territorio alcanza hasta el 70% de lo invertido».

El personaje de Goyo [Gregorio Samsa] al que Juan Manuel Chumilla-Carbajosa y Gracia Chumilla han dado forma en el guion de 'Meta Morfosis' «está pensado para Enrique Martínez», insiste el cineasta cartagenero, que lo considera parte del germen de este proyecto en preproducción. «Uno de nuestros grandes actores -murciano-, con una larga carrera en teatro, cine y televisión, que también tiene grandes dotes para la expresión corporal y el dominio de la voz. No me imagino otro actor que lo pueda hacer mejor», loa Chumilla al de Alcantarilla con su 'sí quiero' en el zurrón.

Pelirrojo de nacimiento, José Quetglas, el maquillador imprescindible del cine español -acumula siete premios Goya y un premio Bafta por películas como 'El día de la bestia', 'Goya en Burdeos' o 'El laberinto del fauno'- y en retirada (aseguraba ya hace casi una década), está trabajando en la metamorfosis que sufrirá el protagonista de esta historia de humano pelirrojo al «bicho que más odio», el picudo rojo, para el rodaje del «'thriller' psicológico de ciencia ficción» ambientado en el Valle de Ricote.

Una transformación que permitirá a Chumilla humanizar en pantalla un insecto, «tan ajeno a nosotros, de una biología tan diferente y misteriosa», así como explicar el proceso de cambio que sufrirá Goyo y que «Kafka resuelve en la primera frase».