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Fiestas de la Purísima. Yecla, 2011. Joaquín Zamora

Capturas del fervor y la tradición

La sala Glorieta Uno de Murcia acoge, hasta el 21 de julio, la exposición 'Tiempo de fiesta II', con instantáneas realizadas por Tomás García Martínez y Joaquín Zamora

Viernes, 7 de julio 2023, 00:14

A través de una selección de fotografías realizadas por Tomás García Martínez y Joaquín Zamora, el proyecto 'Tiempo de fiesta II' pretende rendir homenaje a ... los cuadrilleros, troveros y auroros de la Región de Murcia. «Hombres y mujeres activos en las músicas tradicionales de esta tierra milenaria, amantes del folklore musical por jota, malagueña o seguidilla; enamorados de la cuarteta, quintilla o décima y admiradores del rezo cantado al amanecer», explica Tomás García Martínez sobre una exposición que se puede visitar, hasta el 21 de julio, en la sala Glorieta Uno del Ayuntamiento de Murcia y que sirve para repasar algunos de los diferentes acontecimientos festivos que transcurren a lo largo del año en la Región de Murcia, «celebrados en lugares populares o recónditos», matiza el documentalista García Martínez sobre estas fotografías con las que se pone rostro a la fiesta.

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«Hombres y mujeres partícipes de ancestrales rituales, ejecutantes de músicas y bailes tradicionales en romerías, encuentros y fiestas populares», explica. En la exposición se podrán ver imágenes tomadas en carreras de aguilando durante la Navidad, encuentros de cuadrillas y de auroros, fiestas patronales, romerías, procesiones, encuentros troveros y acontecimientos sociales celebrados durante los últimos quince años. Fotografías tan dispares como las que aparecen sobre estas líneas: las Fiestas de la Purísima, en Yecla; la Gran Cabalgata de Jumilla; la carrera de cintas a caballo en Pozo Estrecho; y la tradición carnavalesca de Los Cherros de Zeneta.

En grande, Gran Cabalgata de Jumilla; Carrera de cintas a caballo en Pozo Estrecho y Los Cherros de Zeneta, en pequeño. J. Z. / T. G. M.

«Nuestra Región atesora en cada uno de sus pueblos, una enorme cantidad de rituales festivos de los que, en muchos casos, apenas sabemos nada», afirman Tomás García Martínez y la también documentalista María Luján Ortega, quienes consideran que «cada uno de estos rituales y acontecimientos resultan de un valor incalculable» y ponen como ejemplo «los cantos de aguilando, bailes de inocentes, elaboración de dulces y representación del Auto de Reyes durante la Navidad; la imposición de las candelas sobre la garganta; las promesas por un ser querido; los rituales de carnaval; tiznarse la cara; los cantos primaverales a la Santa Cruz y la Virgen; la bendición del santo patrón a los niños nacidos en el año; los encierros de toros; el toque del tambor y la dulzaina; las dianas floreadas; las romerías, procesiones, novenas y rogativas a lo largo del año, en especial el verano...». Manifestaciones populares, religiosas y paganas, que consiguen reunir para su disfrute a diferentes generaciones, a familiares y amigos. Siempre con el entusiasmo intacto.

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