Alcaraz triunfa en los Laureus antes de citarse con la gloria en Roma y París

Carlos Alcaraz , el hombre llamado a tratar de llenar el inmenso vacío que Rafa Nadal dejará algún día en el tenis español, brilló en la noche de París, donde en el suntuoso Pavillon Vendôme se celebró la ceremonia de entrega de los Premios Laureus tres años después. En la Ciudad de la Luz el murciano aspirará en unas semanas a conquistar el sueño de Roland Garros, pero de momento de la capital francesa se lleva el reconocimiento al Mejor Deportista Revelación del Año, un merecido premio para un prodigio de 20 años recién cumplidos que ya presume en su palmarés de un Grand Slam (US Open 2022) y cuatro Masters 1.000 (Madrid 2022 y 2023, Miami 2022 e Indian Wells 2023).

«Este premio es fruto de todo el trabajo de un equipo que hay detrás de mí cuando estoy en la pista. Todo el sacrificio y el dolor de los momentos duros merece la pena por ellos», señaló el tenista de El Palmar, llamado a marcar una época, tras recibir el premio de manos del exfutbolista portugués Luis Figo.

Antes de la gala conoció al argentino Leo Messi, que fue el gran triunfador de la gala. El argentino olvidó por un momento su delicada situación en el París Saint-Germain y los rumores acerca de su futuro que le sitúan en la órbita del fútbol saudí y acaparó todos los focos.

Messi conquistó el segundo galardón de su carrera como Mejor Deportista Masculino Internacional del Año, tras el que logró en 2020, y entra a formar parte de la exclusiva nómina que conforman los tres mejores tenistas de la historia, Roger Federer (5), Novak Djokovic (4) y Rafa Nadal (2); el atleta jamaicano Usain Bolt (4); el golfista estadounidense Tiger Woods (2) y el piloto de Fórmula 1 alemán Michael Schumacher (2), todos ellos multipremiados en los Laureus. Además, la selección argentina que el '10' lideró en el Mundial de Catar hacia la tercera corona de su historia vio reconocido el hito con el galardón al Mejor Equipo del Año, cerrando el círculo para el rosarino.

Alcaraz, acompañado de su familia en París, tuvo un breve encuentro en el photocall del evento con Messi. Ambos se saludaron e intercambiaron unas pocas palabras entre grandes gestos de admiración. Las imágenes fueron recogidas por los fotógrafos allí presentes y significó un bonito cruce de mundos entre dos grandes deportistas del fútbol y del tenis.

Acabada la fiesta, Alcaraz se centra ya en lo que viene a partir de ahora. No hay tiempo para demasiados festejos, pues este viernes debutará ya en el Masters 1000 de Roma con varios frentes abiertos. Será su estreno en el Foro Itálico. El curso pasado decidió no jugar en la ciudad eterna tras ganar en Madrid para descansar y hacer una preparación exhaustiva para Roland Garros. «Mejor descansar y estar en París al 100%», dijo por aquel entonces el tenista de El Palmar.

Al igual que el año pasado, Alcaraz viene de jugar Indian Wells, Miami, Barcelona y Madrid en apenas un mes y medio. La fatiga le jugó una mala pasada en 2022 y por eso decidió prescindir del histórico torneo romano. Este año la sombra de la duda sobrevolaba el ambiente, pero el propio jugador se encargó de despejarla: «Soy ambicioso y vamos a ir a por Roma». Alcaraz no defiende ningún punto en Italia, por lo que todo será sumar para él.

Solo con pisar suelo romano, el murciano ganará diez puntos ATP, y superará a Novak Djokovic en lo más alto de la clasificación. El serbio, sin embargo, defiende el título y no sumará punto alguno. Por tanto, Alcaraz afronta la cita como una oportunidad de oro para distanciarse del serbio. Lo hará además como máximo favorito en otro torneo sin Rafa Nadal. El torneo de Roma acaba el 21 de mayo, y el 22 se actualizará la clasificación la ATP donde el último ganador del US Open recuperará el número uno del mundo en detrimento de Djokovic. Después tendrá una semana de descanso activo para la gran cita de la gira de tierra batida y que Carlos Alcaraz, Rafa Nadal y Novak Djokovic tienen marcada en rojo en sus calendarios: Roland Garros.

Por primera vez en los últimos 20 años, Nadal no será el máximo favorito a revalidar su título la arcilla de París. El balear, si es que finalmente disputa el Grand Slam, como parece que hará, salvo causa de fuerza mayor, llegará físicamente entre algodones y sin ningún torneo de preparación previa en arcilla. El actual número 14 del mundo podría jugar ante Alcaraz o Djokovic en tercera ronda u octavos, situación que sumada a sus constantes problemas físicos reducen el porcentaje de opciones de reconquistar su torneo predilecto.

El torneo parisino es especial porque será la primera oportunidad de desempate en Grand Slams entre Djokovic y Nadal: ambos cuentan con 22. El serbio venció en Australia, y aunque no llega en las mejores condiciones físicas por sus recientes molestias en la muñeca que le hicieron perderse Madrid, será junto al murciano el gran candidato al título.

Todos estos condicionantes colocan a Carlos Alcaraz en una posición ventajosa para lograr algo grande la capital de Francia y soñar con levantar la Copa de los Mosqueteros, y cerrar de esta manera una gira de tierra batida impecable tras ganar en Barcelona y Madrid.

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