Cela, el dinosaurio que ya no está
IÑAKI EZKERRA
De todos los comentarios que hizo Umbral cuando murió Cela me llamó la atención uno muy breve que explicaba su perplejidad ante el adiós de alguien a quien había sentido toda su vida como un ser cercano: «Pero si ya no está...». Pensando en esas cinco palabras tan cortas, me acuerdo del famoso y diminuto cuento de Monterroso: «Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí». Y es que el 'pésame' de Umbral era como ese microrrelato pero al revés: «Cuando despertó, el dinosaurio ya no estaba allí»
