En busca de soluciones para impulsar el turismo

El turismo está incluido en al menos tres de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la agenda de Naciones Unidas para 2030. De forma que la sostenibilidad en el turismo está presente en la agenda de todos los gobiernos e instituciones.

Asimismo, los efectos de la pandemia provocada por la Covid-19 han llevado a incluir una línea de actuación orientada a conseguir destinos más seguros en el plan de recuperación para Europa, a través de los Fondos Next Generation.

Y además el sector turístico tiene un importante peso en la economía de la Región de Murcia y toda España. Ha sido motor de recuperación en crisis anteriores y está sufriendo especialmente la actual. Conocer con detalle el sector sin duda ayudará a desarrollar medidas más eficaces para su recuperación.

Por todo ello, en la Facultad de Ciencias de la Empresa de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) se llevan a cabo varias líneas de investigación, las cuales responden a necesidades actuales del sector, alineadas con objetivos destacados por organismos como Segittur o Turespaña, tales como la digitalización del sector y los destinos turísticos inteligentes.

De hecho, según Miguel Ángel Tobarra, decano de la Facultad e investigador del grupo de Economía, Territorio y Medio Ambiente, «estos objetivos están también presentes en la Estrategia de Investigación e Innovación para la Especialización Inteligente de la Región de Murcia (RIS3Mur) en la que colaboran instituciones como el INFO o el ITREM, que busca nuevos modelos de negocio basados en la tecnología, nuevos productos y servicios innovadores».

Entre las líneas que se trabajan destacan tres: impacto económico de las actividades turísticas, financiada por la Fundación Santo Domingo, a través de la cátedra de competitividad del Colegio de Economistas; seguridad de destinos, en la que se enmarca el proyecto HORECoV-21 financiado por el Gobierno regional para ayudar a la hostelería y el turismo de la Región de Murcia; y una línea sobre sostenibilidad que cuenta con financiación propia de la Universidad a través del programa Erasmus o la cátedra Santander.

«En el caso de la línea de impacto económico, se trataría de valorar el efecto que tiene el gasto turístico asociado a un evento, un producto turístico o incluso el conjunto del sector en la economía de un determinado territorio. La seguridad en destinos tiene una gran importancia en este momento. Así, se trabaja en la detección de necesidades de los establecimientos del sector turístico, que permitan desarrollar medidas orientadas a potenciar la seguridad. Por último, en el tercero de los casos, se buscan estrategias que permitan alcanzar crecimiento económico en el sector, inclusión social y cultural y preservación del medio ambiente», como explica Miguel Ángel Tobarra.

El decano considera que «los tres ejemplos expuestos son una excelente muestra de la apuesta de la Facultad de Ciencias de la Empresa por la investigación y la innovación en el sector turístico. Hay muchos otros ya finalizados. También la investigación asociada a las siete tesis doctorales que se están desarrollando actualmente en los dos programas de doctorado con los que cuenta la Facultad. Nuevamente, y por poner solo dos ejemplos, en uno de esos trabajos se analizan las aplicaciones de Big Data en el sector de alojamientos turísticos y el sector inmobiliario; en otro, se centran en el establecimiento de estrategias que generen conciencia, buen comportamiento y uso eficiente de los parques nacionales».

Como consecuencia de todos esos trabajos, se han obtenido numerosos resultados. En los últimos años, por ejemplo, se ha cuantificado la contribución económica de eventos turísticos y del propio sector a la economía regional. En definitiva, los resultados de estas líneas de investigación permiten conocer cada vez mejor el funcionamiento y la estructura del sector.

Destaca Tobarra la importancia de disponer de profesionales cualificados en el sector turístico en general y en la investigación en particular. «El papel de las universidades es aquí fundamental, como lo es disponer de foros que permitan la colaboración permanente de todos los agentes implicados en el sector y que permitan la transferencia de conocimiento hacia las empresas e instituciones. Naturalmente, deberían estar dotados de líneas de financiación que aseguren la excelencia en la investigación y la transferencia de resultados al sector», concluye.