La UPCT trabaja para recuperar varias especies autóctonas

La recuperación de especies autóctonas ya extintas o en peligro de extinción es un tema que en los últimos años ha ganado fuerza en la Región de Murcia. Hace pocos años, la Consejería de Agricultura realizó diversas inversiones para conseguir que el chato murciano volviese a campar por sus tierras. En la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT), el grupo de Producción Animal que dirige la profesora Eva Armero está apostando desde 2010 por un proyecto de recuperación y conservación de la gallina murciana. En la actualidad se ha constituido la Asociación Amigos por la Gallina Murciana (Agamur), a la que la Consejería de Agricultura, Agua y Medio Ambiente de la Región ha concedido recientemente el derecho a llevar el Libro Genealógico de la raza, con la UPCT como director técnico del programa.

«Inicialmente, la UPCT contaba con solo cinco animales (dos gallos y tres gallinas) y, en la actualidad, hay aproximadamente 16 gallos y 80 gallinas que cumplen con el estándar de la raza. Además, entre todos los miembros de la asociación, suman un número similar de aves. No podemos olvidar que se trata de una raza en peligro de extinción con un censo aproximado de 800 animales», en palabras de Armero.

Hasta el momento, se ha llevado a cabo una selección de los animales por estándar morfológico exclusivamente, y también un control de paternidades, con el fin de evitar problemas de consanguinidad. Según la profesora, «la raza todavía presenta mucha variabilidad morfológica, lo que está provocado porque no ha existido previamente un control de los cruzamientos con otras razas. Por ello, seguiremos trabajando en la mejora de la 'pureza racial' de la gallina murciana. Posteriormente, una vez tengamos la línea más depurada, ya estudiaremos cuáles son los caracteres susceptibles de mejora».

Destaca la importancia de la existencia de la asociación, ya que, «para la recuperación y conservación de una raza, es necesario un grupo de criadores que será el responsable de mantener la raza, de llevar el Libro Genealógico, donde se registren aquellos animales que cumplan con el estándar de la misma y que tengan paternidades conocidas. Además, propondrá un programa de genética para su conservación».

Por otro lado, los científicos de la UPCT están atentos a lo que ocurre en las costas. Por ello, el equipo de Eva Armero también investiga la mejora genética de la dorada para caracteres de crecimiento, calidad integral del pez y resistencia a enfermedades. Parte de este proyecto está financiado por la Consejería de Agricultura, Agua y Medio Ambiente y parte por la Junta Nacional Asesora de Cultivos Marinos, de la Secretaria General del Mar y dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino.

Cuenta que «está línea se inicia en el año 2009, ya se han realizado dos generaciones de selección y se han evaluado parámetros genéticos como la heredabilidad para estos caracteres. En la actualidad, se va a llevar a cabo la selección de la tercera generación de peces».

Además, cuentan con un proyecto dirigido al fomento del uso de las leguminosas de grano en la nutrición animal, con el fin de tener una menor dependencia del mercado exterior de la soja. «Se trata de un trabajo financiado por la Comisión, en el que se han realizado ensayos en la dieta de la cabra murciano-granadina para sustituir la soja por el guisante de primavera y también incluir la paja de guisante como materia prima de las raciones. Se ha comprobado que no se afectan los caracteres productivos y que mejora el perfil de ácidos grasos de la leche de cabra», detalla Eva Armero.