«Lo mejor del soberanismo catalán es su publicidad»

En mitad del estruendo anfetamínico de la publicidad actual, aparece un anuncio de un banco, en blanco y negro, en el que dos tipos conversan sin prisa... Y funciona. Toni Segarra, barcelonés de 51 años, padre de tres hijas, director de la agencia 'S,C,P,F...', considerado el mejor publicista español del siglo XX, está detrás del invento.

-¿Pero usted no era el del conciso 'Te gusta conducir'?

-Sí, pero estudié Filología y me considero un escritor de anuncios. La campaña del Sabadell es la antítesis de aquel anuncio de BMW, pero aquí buscábamos un contenido. Todo empezó con la entrevista que le hicimos a Guardiola...

-Guardiola no da entrevistas.

-Ya, pero se ofreció al banco para hacer publicidad.

-¿Guardiola? ¿No ganaba suficiente en el Barça?

-Sí, bueno, su representante lo ofreció.

-¿Y confió en Guardiola un anti-Barça como usted?

-Soy muy 'periquito' (del Español) y al rival le tengo manía, pero en la vida real Guardiola es un tío estupendo y eso me tranquilizó. Además, lo testamos. Pusimos carteles en la salida del Bernabéu y no pasó nada.

-¿Qué tiene que ver una charla entre Guardiola y Trueba con un plan de pensiones?

-Algo debe de tener que ver porque sorprendentemente luego la gente va al banco.

-¿Mejorar la imagen de un banco es como si Hitler le hubiera pedido un lavado de imagen?

-Si yo creyera que un banco es como Hitler no trabajaría para él. -Nueve de cada diez lanzamientos fracasan, según usted.

-Es una cifra que me dio alguien y que es bastante plausible.

-¿Y cómo sobrevive la publicidad con tal índice de fracasos?

-Bueno, como dice esa frase americana de los años 50: «Yo sé que la mitad de lo que invierto en publicidad no me sirve, pero no sé qué mitad es».

-Estrella Morente y Rojas Marcos... ¿A quién se le ocurrió?

-Fue muy pensado, pero luego no sabes si va a funcionar. Y lo hizo. Estrella estaba en un momento delicado tras la muerte de su padre y de pronto una conversación íntima con un psiquiatra se convirtió casi en una sesión de terapia. La publicidad tiene un componente maravilloso de magia. El día que sea algo asbsolutamente científico me retiraré.

-«Odio los anuncios del Sabadell», he leído en internet. ¿...?

-Sí. Una marca que no tenga un porcentaje de gente que la odia no es una marca.

-¿El blanco y negro da más credibilidad?

-Creo que sí. Te remite al mundo de la prensa de toda la vida, de un determinado cine...

-¿A qué huelen las nubes, por cierto?

-Tocar ese temita, el del olor menstrual, era de una complejidad... Pero quince años después sigue siendo un icono. Es verdad que ha generado mucho humor, pero qué sería del humor español sin un chiste de compresas...

-¿Publicita bien Artur Mas la independencia de Cataluña?

-Lo que mejor está haciendo el proyecto soberanista es la publicidad. Un proyecto que a mi juicio es minoritario y de cierto radicalismo ha conseguido disfrazarse de unánime y mayoritario. Me quito el sombrero.

-¿Por qué no crea un buen eslogan antisoberanista?

-Me encantaría, pero esto ya no se arregla con eslóganes sino con política.

-Y eso lo dice el hombre de cuya agencia ha salido 'Bienvenido a la república independiente de tu casa'.

-Eso vino después del 'Redecora tu vida', que tuvo tanto éxito. El cielo de los anuncios es cuando forman parte de la vida de la gente. El de la república independiente fue durante la ascensión de Carod Rovira y algunos nos dijeron que parecía una campaña pseudopolítica.

-¿Hay algún anuncio propio o ajeno que le sonroje?

-El 90% de la publicidad es espantosa, nuestra o ajena. Pero también el 90% de la arquitectura es deleznable, y sin embargo los arquitectos solo hablan de lo que hacen bien.