Casco Antiguo completará la excavación arqueológica de los solares de la Morería
La sociedad municipal pedirá prestado un millón de euros para ampliar los estudios técnicos solo en las parcelas que no están en venta y en las calles
Todos los restos arqueológicos que quedan por excavar en las parcelas situadas a ambos lados de la calle Morería Baja, al oeste del Molinete, serán puestos al descubierto. Parte del trabajo lo hará el Ayuntamiento, con el millón de euros que pedirá a los bancos con tal fin. El resto correrá a cargo de los compradores de las parcelas que están a la venta allí. Estos recibirán una licencia para construir edificios de viviendas, condicionada a lo que encuentren en el subsuelo. La Sociedad Municipal Casco Antiguo se encargará de las prospecciones en todo lo que no se venda. Para ello, su consejo de administración tiene previsto aprobar en su próxima reunión las condiciones para pedir el préstamo correspondiente.
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La vicealcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo, informó ayer del resultado de una reunión mantenida el día antes con representantes de la asociación conservacionista Coordinadora del Molinete. El objetivo era aclararles que arqueólogos del Ayuntamiento y de la Comunidad supervisarán la manera de proceder de la administración local y de aquellos que compren parcelas en la zona. De esta manera, quiso despejar sus temores de que su urbanización puede acabar con restos arqueológicos valiosos del pasado púnico y romano de la ciudad.
PARA TENERLO CLARO
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Iniciativa pública El Ayuntamiento pedirá un crédito para pagar la excavación de lo que queda pendiente en la Morería, incluidas las parcelas que no se vendan y los viales.
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Iniciativa privada En las parcelas que sean compradas, la licencia para edificar quedará condicionadas a su excavación, so pena de revocar el permiso y retener la fianza.
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Monte Sacro El crédito del Ayuntamiento debe bastar para pagar una campaña de excavaciones en la ladera del Monte Sacro, antes de poner en práctica el proyecto de hacer allí el Barrio de Emprendedores.
«También hay prevista una campaña en el Monte Sacro, de forma previa a las actuaciones que el gobierno quiere realizar en esa zona para desarrollar el proyecto del Barrio de Emprendedores», indicó la vicealcaldesa, por medio de un portavoz.
Tanto Arroyo como el director general de Bienes Culturales, Rafael Gómez Carrasco, quisieron zanjar la polémica suscitada en los últimos meses, a nivel nacional, sobre si la reurbanización de esa parte de la ciudad podría poner en peligro restos púnicos y romanos de gran valor. Esa suposición se basa en teorías del director del Museo Nacional de Arqueología Subacuática (Arqua), Iván Negueruela, que da por hecho que en ese sector del cerro estuvo hace más de dos mil años el palacio del general cartaginés Asdrúbal.
«Quince años de protección»
«Hace más de 15 años que el patrimonio que hay en el casco histórico está amparado y protegido», aseveró Arroyo. A los representantes de la coordinadora les dijo que para eso está vigente el Plan Especial de Ordenación y Protección (PEOP).
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Por eso, el Ayuntamiento seguirá adelante con sus planes de desarrollo de la zona, utilizando varios métodos complementarios. La primera medida es llevar a buen puerto la oferta de vender cuatro parcelas que, según anunció hace un par de meses la alcaldesa, Ana Belén Castejón, y confirmó ayer Arroyo, «no están en la ladera oeste del Molinete, sino al otro lado de la calle Morería Baja», aunque todo el sector está incluido en el mismo programa urbanístico, el Plan Especial de Reforma Interior (PERI) del Molinete.
Durante la última década, se han repetido los intentos de vender esos terrenos, en bloque y de forma separada. Pero Casco Antiguo solo consiguió deshacerse, en 2016, de dos parcelas situadas entre las calles San Fernando y del Parque. Después de diez años, sigue en discusión si el Ayuntamiento debe impulsar las excavaciones antes de vender, o ha de obligar a que las haga quien adquiera los solares.
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Licencias condicionadas
Por eso, si por fin tiene lugar una nueva venta, hay medidas previstas para garantizar que lo que aparezca en el subsuelo será preservado. «Las licencias de obra para hacer edificios serán condicionadas a una campaña de prospecciones, que se harán bajo las directrices de la Dirección General de Bienes Culturales de la Comunidad Autónoma y del Ayuntamiento. y previo depósito de una fianza. De esta manera, un incumplimiento o una mala praxis pueden suponer la revocación del permiso y la ejecución de la cantidad depositada», indicó Arroyo. «No basta con hacer catas, que son un mero muestreo; hablamos de excavar las parcelas», aclaró. «El objetivo es conseguir que en ningún momento haya en peligro elementos valiosos del patrimonio arqueológico», añadió.
En los terrenos que no están a la venta o no encuentren comprador, será el Ayuntamiento el que actúe por medio de Casco Antiguo. Arroyo informó de que el millón de euros del préstamo también dará para hacer excavaciones en el Monte Sacro.
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En la reunión con la Coordinadora del Molinete, la vicealcaldesa indicó que en la Morería Baja no solo se pondrá al descubierto lo que haya en las parcelas, sino también lo que hay bajo la calzada y en la de la calle adyacente de Cantarerías. La urbanización posterior de los viales dependerá de los hallazgos.
Restos a cubierto
Otra máxima del Ayuntamiento es evitar que las prospecciones tengan lugar de forma deslavazada. «Para que los restos encontrados guarden cierta unidad y estén comunicados, aunque la zona esté dividida en parcelas, los edificios que se construyan allí harán de 'cubierta'. Además, así no quedaran a la intemperie», indicó Arroyo, a través de su portavoz.
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Cultura descarta de plano catalogar la zona como BIC
La Dirección General de Bienes Culturales de la Comunidad Autónoma respaldó ayer la tesis del Ayuntamiento de que la protección de los restos que salgan a la luz en la Morería ya está garantizada y aseguró que supervisará que se cumpla. Por eso, consideró que no procede declarar ese espacio como Bien de Interés Cultural (BIC), como pide la Coordinadora del Molinete. La comparación que los representantes de esta asociación conservacionista hicieron con el yacimiento de San Esteban de Murcia no sirvió de nada. Tampoco las alusiones a la existencia en el subsuelo de la parte más cercana a la Puerta de Murcia de un edificio público que podría ser de época púnica o tardorromana. A juicio de la Coordinadora, las autoridades deben impulsar una excavación, en lugar de vender y encargársela al comprador. «Sabemos de la existencia de lo que podría ser un antiguo mercado», indicó Arroyo, que lo incluyó entre los elementos cuyo valor será supervisado por los técnicos de la Comunidad. No todo fueron malas noticias para la plataforma. Su propuesta de conseguir fondos europeos para llevar a la práctica un proyecto de protección patrimonial de la zona está siendo estudiada por la Consejería de Cultura.
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