Los cambios de viento enredan la regata

La penúltima prueba del 24 Trofeo Carabela de Plata, el Gran Premio Ayuntamiento de Los Alcázares, encontró un obstáculo que restó vistosidad a la prueba. Los continuos roles de viento provocaron gran dificultad en las maniobras de navegación a los treinta barcos participantes en la jornada del sábado en aguas del Mar Menor.

El comité dio la salida a los cruceros a las 12 horas, con arreglo a la categoría en el que compitieron y al rating de cada uno. Los primeros en salir fueron los ORC4, que recorrieron 9,1 millas náuticas. A continuación los ORC3 y ORC2 para cubrir las 10,1 millas establecidas. Y las embarcaciones con menor eslora, que son las de sport, solo recorrieron 4,1 millas sobre un barlovento-sotavento. La baliza de desmarque para el resto de la flota se situó a 0,4 millas del inicio, para continuar a partir de ella el recorrido costero de la regata. Las otras balizas frente a la zona del Puerto Tomás Maestre, en la isla del Barón y detrás de la isla Perdiguera, las tomaron por estribor.

A partir de aquí los barcos de clase ORC pusieron rumbo a la línea de llegada junto al Club Náutico Mar Menor que, a su vez, es el organizador de este interesante trofeo de vela para cruceros. El viento, al comienzo de la prueba sopló del norte para rolar a Levante variando a veces el mismo con intensidad entre 7 y 10 nudos. El primer barco en llegar en tiempo real fue el 'Kawan'.