Luis Cayo Pérez Bueno, la voz de las personas con discapacidad
Calasparra, 1966. Impulsor de la tercera reforma constitucional que retiró el término 'disminuido' y lo cambió por 'persona con discapacidad'
El calasparreño Luis Cayo Pérez vivió este año uno de los momentos más importantes de su extensa carrera como voz del colectivo de personas con discapacidad: la aprobación de la tercera reforma de la Constitución Española en 45 años para eliminar el sesgo discriminatorio que había permanecido en el artículo 49 del texto desde su nacimiento, al retirar el término 'disminuido' y cambiarlo por la denominación de 'persona con discapacidad'. El presidente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad siguió el histórico momento, que tuvo lugar en enero, desde la tribuna de invitados del Senado, donde se desató un intenso aplauso tras la consecución de esta conquista social, que nació del impulso de la institución que dirige, y en la que su implicación personal ha sido clave.
El nuevo texto dejó atrás los tintes peyorativos de un término ya superado para pasar a señalar que «las personas con discapacidad ejercen los derechos previstos en este Título en condiciones de libertad e igualdad reales y efectivas». El nuevo artículo 49 añade, además, que «se regulará por ley la protección especial que sea necesaria para dicho ejercicio». Esta última frase abre un nuevo horizonte en cuanto a las obligaciones de las administraciones públicas en España. Y en esa labor, en hacer que cristalicen en medidas concretas, se encuentra inmerso el calasparreño desde entonces.
El pasado mes de octubre, el presidente del Cermi volvió al Senado para recordar a los representantes políticos la importancia de dar cobertura al cambio constitucional con una batería de reformas legislativas. En la Comisión de políticas integrales de discapacidad, reclamó «más y mejores leyes» para el colectivo, que sufre un «castigo sin culpa». Por ello, solicitó apoyo para reformar, entre otras, la ley general de derechos de las personas con discapacidad, la ley de promoción de la autonomía personal y atención a las personas con dependencia o la ley de propiedad horizontal, en la búsqueda de una accesibilidad universal al bien básico de la vivienda. No faltará empeño y dedicación por su parte para conseguirlo.
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