El ascenso del UCAM, la gran ilusión de Javier

La ilusión es el aspecto más importante para cualquier aficionado al fútbol. Es el motivo que lleva a los hinchas a hacer esfuerzos de todo tipo para seguir a su equipo y pocas razones hay mejores que la posibilidad de vivir un ascenso en directo. Uno de esos días grandes en los que presenciar lo que suceda en el césped desde la grada es totalmente inolvidable junto a otros aficionados que entienden esa pasión. Por eso Javier Esparza, un joven murciano de 21 años que sufre una parálisis cerebral, no dudó ni un minuto en apuntarse al viaje que organizó el UCAM la semana pasada para vivir en directo el duelo de los universitarios contra el Barça B. Allí sufrió mucho y disfrutó junto al resto de hinchas y miembros del equipo azulón del pase a la final. Ahora, una semana después, va a volver a repetir ese desplazamiento con más de 1.400 kilómetros de carretera y un día prácticamente metido en un autobús con el sueño de celebrar el ascenso cuando el árbitro pite el final.

Javier, que es un gran apasionado al fútbol, se hizo del UCAM en 2014 cuando fue a ver un encuentro contra el Betis B. «Disfruté mucho del ambiente en el estadio y de ver un partido en directo», explica el joven murciano. A partir de ese momento, quiso sacarse su carné de abonado y disfrutar de esa experiencia cada semana en el Besoccer La Condomina. Este aficionado azulón, nacido en Jumilla pero que vive en el Rincón de Seca, reconoce que «la semana se ha hecho muy larga, todos estamos deseando que llegue el partido de una vez y que pase lo que tenga que pasar. El Ibiza es un rival duro y va a poner las cosas muy difíciles, pero este equipo ha demostrado que es capaz de ganar a todos».

En el club universitario resultaron muy emotivas las imágenes de Javier en la grada del Vicente Sanz de Don Benito y han querido premiar su fidelidad regalándole a él y a su acompañante el viaje hasta Badajoz. También le van a entregar una camiseta firmada por todos los jugadores de la primera plantilla. Incluso le han pedido un vídeo motivador para que los futbolistas lo vean instantes antes de saltar al campo del Nuevo Vivero. No parece que a nadie le puedan faltar las ganas en un día así, pero viendo la ilusión de este aficionado seguro que algún jugador hace una carrera extra cuando las fuerzas empiecen a fallar.

Uno de los aspectos que preocupa tanto a Javier como a Inmaculada Fuentes, su madre, es que las personas con discapacidad puedan acceder a los campos de fútbol de la manera más cómoda. Javier puede moverse con un andador y llegar a su asiento apoyándose en las barandillas al subir las escaleras, pero no en todos los casos es así. «Estamos muy agradecidos al UCAM por las facilidades que nos dan, pero no en todos los estadios sucede y para la gente que va en silla de ruedas acudir a los campos todavía es un gran problema. Si no fuera así muchos más se animarían a ir», asegura Inmaculada. Por ello, cree que «la sociedad y los clubes de fútbol deben tener una especial sensibilidad con estos asuntos. A ellos les cuesta muy poco y para estas personas es una gran ayuda que agradecen».