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Las dos activistas de Greenpeace, hace 37 años, sobre la tubería de vertidos en Portmán. Lorette Dorreboom

«Ahora podemos ver un Portmán de colores»

Un documental permite el regreso a la bahía de dos activistas de Greenpeace que en 1986 mostraron al mundo el desastre ambiental de los residuos mineros

Jueves, 21 de diciembre 2023, 01:18

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La mañana era gris y el mar negro. La lancha de Greenpeace desembarcaba en la bahía de Portmán. En ella iban a bordo las activistas María Teresa Pérez y Zoa Jiménez, acompañadas de la fotógrafa de la organización Lorette Dorreboom y otros compañeros con los que viajaban por el Mediterráneo con el famoso navío 'Sirius'. Esa mañana del 31 de julio de 1986, hace 37 años, cambiaría la vida de estas dos precursoras del feminismo medioambiental. ¿Su objetivo? Tocar las narices a una de las mayores empresas mineras que han existido en España. Esta historia se rescata ahora con el documental '.Portmán, un punto y seguido', producido por el creativo y publicista murciano Jorge Martínez y el estudio de diseño F33.

«La actuación que tuvimos en Portmán marcó un hito en la defensa del medio ambiente», explicaba ayer María Teresa en La Unión, décadas después de atarse con una cadena a las verjas metálicas que protegían el final de la tubería por donde la mercantil Peñarroya vertía a la bahía los residuos mineros de su lavadero, denominado Roberto. Su amiga estaba al lado, y ambas, vestidas con un mono blanco, observaban de reojo cómo otros compañeros trataban de colocar una chapa metálica en la boca de la tubería para frenar el vertido.

«Aquella gente de Portmán no había vivido de otra cosa. Vieron cómo una panda de guiris llegaba allí a dar lecciones en su tierra. Pero han sido capaces de pasar de esa barbarie a cerrar» la fuente contaminante de la bahía, recordaba Zoe. La acción reivindicativa de Greenpeace llevó a este pueblo de La Unión a una repercusión mundial nunca vista. La clave fue una foto de Lorette, que pilló de espaldas a las dos activistas mientras miraban desde la playa cómo el chorro del vertido se dispersaba para todos lados porque la empresa había aumentado la presión de la tubería.

Presentación del documental con Jorge Martínez, María Teresa Pérez, el alcalde Zapata, Zoa Jiménez y Joaquín Martínez. J. M. Rodríguez/ AGM

«Nos llovía barro de todos lados, tuvimos que salir de ahí», recuerdan ambas, mientras rememoran cómo los trabajadores de Peñarroya se concentraron frente a ellas para arrojarles más tierra manchada con metales pesados. «Estaban defendiendo su pan, pero lo que es pan para hoy, es desolación para mañana», incidía Teresa. Las dos recuerdan aquel día en blanco y negro. Con el documental, su vuelta a la bahía les trajo recuerdos de sus años aguerridos en Greenpeace. «Hemos visto un Portmán de colores».

La naturaleza ha logrado regenerar «una parte de la bahía» con el paso del tiempo. El problema sigue enquistado, más de 50 millones de toneladas de residuos tóxicos descansan en el mar, pero la acción de esta dos mujeres logró acabar con el enterramiento de Portmán.

  1. Un punto y seguido en la bahía que ha unido a las tres administraciones

El documental '.Portmán, un punto y seguido' es la carta de presentación de la marca creada por el publicista Jorge Martínez y el estudio F33 para el Plan de Sostenibilidad Turística que ha beneficiado a la pedanía de La Unión con un millón de euros para su transformación como destino de interés cultural y social. La clave de captar el interés en Portmán a través de su desastre ambiental y una pieza audiovisual reside en la virtud de no esconder los errores del pasado y mostrar un pueblo comprometido ahora por recuperar su paisaje marítimo. «Nos gustaba la idea de que Zoa y Teresa regresaran a Portmán para que fueran ellas las que pusieran ese punto y seguido en un relato en el que el pueblo tiene derecho a reclamar una justicia», detallaba ayer Martínez.

Este plan es una colaboración a tres bandas entre el Ayuntamiento de La Unión, el Ejecutivo regional y el Gobierno de España, algo que pocas veces se logra ver en la cuestión de la bahía y su recuperación. «Un acuerdo así es bueno para Portmán, que se ha visto muchas veces en medio de una batalla política». El documental permite dar una «herramienta a los vecinos para que aprendan a transmitir lo que se ha hecho mal y que se continúe en el camino de la regeneración», explicaba Joaquín Martínez, director creativo F33.

En el propio documental, el expresidente del comité de empresa de Peñarroya, Luis Martínez, pide perdón a las dos activistas: «Debíamos haber luchado mucho antes y de otras formas. Hasta entonces se desconocía el medio ambiente en España».

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