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El «fascinante» mundo de José Carlos Nievas
El artista presenta hasta el 10 de junio en el Museo de la Sangre de Murcia retratos de grupos y profesionales del sector musical: «Lo que tienen en común es que me gusta lo que hacen»
He aquí un hombre al que la fotografía encontró: José Carlos Nievas (Bujalance, Córdoba, 1966). «Intimida mucho» estar delante del objetivo, dice. En esta ocasión él posa para José Luis Ros Caval para esta entrevista, con motivo de la exposición '+Future', su serie de retratos dedicados a profesionales de la industria musical, que estos días puede verse en el Museo de la Sangre de Murcia, bajo el impulso y proyección de Pedro Alberto Cruz. «Pero Ros Caval fue estupendo», admite Nievas, que por naturaleza sonríe y tiene buen ánimo. Esa positividad que irradia en persona también aparece en su obra. «Artista plástico y visual, videoescenógrafo, fotógrafo teatral y soporte técnico para artistas visuales», se define Nievas, que cuando atiende a LA VERDAD anda actualizando su perfil en 'Arte Informado', espacio iberoamericano del arte. Recién llegado de la Bienal de La Habana, todo ese universo decadente y esa humanidad que no se atrinchera en la soledad y el recogimiento de una isla como Cuba han venido con él. Una emoción que aún lleva en los ojos: necesita compartirla, expresarla.
Rodeado de vírgenes, santos, crucificados, ángeles... y, quién sabe si también de demonios, cuelgan cuarenta retratos de músicos pero también 'supervivientes' del sector musical, como locutores de radio, promotores, diseñadores que han ilustrado portadas de discos, como es el caso del murciano Magius, Premio Nacional de Cómic en 2021, y fundadores de discográficas como Carlos Galán, del sello Subterfuge, que a lo largo de los años ha conocido José Carlos Nievas, fotógrafo verdaderamente solicitado. «El Museo de la Sangre de Murcia es contemporáneo no, lo siguiente. Una cosa maravillosa. El discurso expositivo es de una modernidad alucinante», confirma el artista. «Me decía Carlos Valcárcel Siso [presidente de la Real, Muy Ilustre, Venerable y Antiquísima Archicofradía de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo] el día de la inauguración que estaba encantado por ese giro y esa novedad de público, y hay que agradecerles que estén dando cabida a cosas que están pasando, a lo contemporáneo, porque mi obra es hoy». Es hoy, pero posiblemente también sea para siempre, pues la fotografía no es un ser moribundo, todo lo contrario: está siempre viva. «Cuando lees ese tratado que es 'La cámara lúcida', de Roland Barthes, habla de cómo la fotografía para el tiempo: atrapa el instante». Decía Barthes, con seso y veteranía: «Una especie de vínculo umbilical conecta el cuerpo de la cosa fotografiada con mi mirada: la luz, aunque intangible, es aquí un espacio carnal, una piel que comparto con la persona fotografiada».
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Nievas está contento con el concepto expositivo, porque este proyecto artístico, '+Future', ha quedado «muy limpio, y se ve muy bien». La primera fotografía de esta serie de retratos del mundo musical la hizo en 2009, a Nacho Vegas: fue la primera vez que tuvo consciencia de que había realizado una foto no para publicar en revistas especializadas o en discos, sino para ser exhibida en una sala. En 2017, de hecho, mostró en la galería Modus Operandi de Madrid una selección de sus trabajos musicales bajo el título 'Music & Lights': «Había algo de flamenco, videoclips, retratos de músicos más en el concepto retrato, y como pieza la caja de discos, de que el espectador extrae un retrato en lugar de un vinilo físico».
¿Qué debe tener una fotografía para estar en una exposición como esta? «Yo invité -recuerda Nievas- a Nacho Vegas, por ejemplo, a hacerle fotos porque quería iniciar esta serie de músicos independientes. Lo había visto en directo, pero no lo conocía, siempre me gustó lo que hacía desde los tiempos con Manta Ray. Aquello fue un retrato más clásico, pero se ha ido convirtiendo en algo más peculiar, porque con la caja de discos el público tiene que interactuar para ver las fotos y sacarlas de los propios discos. Aunque en Murcia las imágenes están colgadas por primera vez en la pared, en Pinar del Río, en la Bienal de la Habana, sí está en ese formato original».
En el Museo de la Sangre, de esos cuarenta retratos, la mitad son de gente de la Región de Murcia. Entre ellos, por ejemplo, Al Dual, Alberto Charro de Los Malinches, Alejandro Martínez de Alexanderplatz, Alfonso Alfonso, Ángel Sopena, Bigote Chino, Crudo Pimento, Higinio, Iluminados, Luis Miguel Fernanz Martínez [director y organizador del festival Ruidismo de Bullas], Man Pop [dj residente de la sala Fotomatón de Madrid], Marcelo Criminal, Salva Alambre, Sudores de Muerte, Ruth Sánchez del grupo Vacaciones, The Yellow Melodies, Suzukid Dj...
«A Magius lo incluyo en esta serie porque diseñó la portada del disco 'No todos pueden ser Sudores de Muerte (2006-2018)'», recuerda Nievas, que lleva muchos años haciendo fotos y videoclips a grupos míticos como Parade, alias de Antonio Galvañ, músico y profesor de música de Yecla. «Me tiene que gustar mucho el trabajo de la gente a la que yo retrato, y he hecho fotos que van en otra onda, como los encargos para revistas como 'Rockdelux', pero son otra cosa. En realidad, el vínculo de esta exposición soy yo, porque son todos artistas que me gustan a mí».
Entre los murcianos figuran Magius, Al Dual, Bigote Chino, Sudores de Muerte, Marcelo Criminal, Higinio y Alexanderplatz
Además de Nacho Vegas encontramos, del panorama nacional, otros personajes reconocibles como Leopoldo Panero, Óscar Mariné, Sr. Chinarro, La Habitación Roja o Carolina Durante. «Si algo distingue el trabajo del autor cordobés», observa Pedro Alberto Cruz, comisario de '+Future' y director del Museo de la Sangre de Murcia, «es la insoslayable factura pictórica de sus fotografías. Lejos de pretenderse el ensimismamiento de lo fotográfico, Nievas fuerza su extrañamiento mediante un tránsito desde lo mecánico (la cámara) hasta lo gestual (el pincel). Lo suyos son trabajos híbridos en los que fotografía y pintura crean imágenes impuras de una gran potencia expresiva». Cruz, profesor de Historia del Arte en la Universidad de Murcia y memorialista de performances, invita encarecidamente a visitar esta «suerte de vademécum» del «singular y fascinante universo fotográfico» de Nievas. «En contra de lo que suele ser habitual en la identificación de este sector cultural, sus representantes no solamente son captados fuera del escenario o de cualquier ambiente musical, sino que, además, son explorados mediante un sugerente proceso de des/re-contextualización. El reto al que se enfrenta Nievas es transmitir la especificidad de un mundo con tantos estratos como el de la música por medio de retratos que escapan a cualquier intento de estereotipación. De hecho, uno de los rasgos que más llama la atención de dichos retratos es cómo la identidad de cada uno de los protagonistas se fija sin necesidad de enfatizar una determinada pose», afina el comisario.
Hasta el 10 de junio puede disfrutarse esta propuesta fotográfica, con un lenguaje muy publicitario, pues casi todas ellas podían ser portadas de discos, en El Carmen, en Murcia, de lunes a viernes, de 10 a 13.30 y de 16 a 19 h.
Anteriormente, Nievas también dedicó tiempo a una serie de retratos sobre gente de las artes escénicas, inaugurando exposición en el Museo Nacional del Teatro de Almagro (Ciudad Real), y giró por otros museos y teatros, como el Español en Madrid. «Yo creo que, en realidad, tanto la serie de retratos de gente del teatro, como ahora la de los músicos, no la he cerrado. Podría enseñar también otra de poetas, pero todavía no me ha llegado la motivación para enseñarlo. Ahora estoy con 'Negro Sangre', también retratos de gente que se ha anticipado al futuro».
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