Alcaraz arranca en Melbourne su camino hacia la cima del tenis
El murciano no se confiará en su estreno ante el chileno Tabilo y se marca el reto de llegar a la segunda semana en el Grand Slam australiano
FRANCISCO J. MOYA
Domingo, 16 de enero 2022, 13:31
Promesa. Esperanza. Embajador. Prodigio. Relevo. Elegido. Talento. Campeón. Futuro. Presente. Son términos que se han usado en los últimos meses para referirse a Carlos Alcaraz (El Palmar, 18 años), un tenista que está llamado a marcar una época en este deporte. Todavía no se ha ido Rafa Nadal, mito viviente que buscará en este 2022 la guinda a una carrera de leyenda si su cuerpo se lo permite, pero ya está llegando el joven tenista murciano. Al margen del 'terremoto Djokovic', todos hablan de Alcaraz y el chico criado en las pistas de El Palmar y moldeado en Villena por Juan Carlos Ferrero ni pestañea. Si tiene presión no lo parece. Lo disimula perfectamente.
Arranca en Melbourne para Alcaraz un 2022 en el que todos los ojos van a estar puestos en él. En 2021 protagonizó la mayor escalada en todo el ránking mundial, ganando 109 puestos en solo 12 meses y superando a jugadores como Karatsev, Korda, Ivaskha o Norrie, quienes también brillaron con luz propia en el último curso. Lo del murciano, sin embargo, fue algo más. Fue una irrupción en el circuito como hacía mucho tiempo que no se veía.
Ganó su primer torneo, en Umag (de categoría ATP 250), tumbó a estrellas consagradas como Stefanos Tsitsipas, Matteo Berrettini, Jannik Sinner y Andy Murray, asombró al público de Nueva York metiéndose en los cuartos de final del Grand Slam estadounidense y cerró la temporada levantando la Copa de Maestros para menores de 21 años. No pudo debutar en la Copa Davis por culpa de un inoportuno positivo por coronavirus a un día de comenzar el torneo de selecciones en Madrid. Esa fue su carta de presentación. Lo que tiene ahora por delante es el año de su confimación.
Lo difícil es mantenerse
En el tenis es más difícil mantenerse que llegar. Eso lo sabe Alcaraz, bien asesorado por Juan Carlos Ferrero y por su mánager, un Albert Molina que las vio de todos los colores cuando llevó las carreras deportivas del alicantino David Ferrer y el murciano Nico Almagro. Alberto Lledó (preparador físico), Juanjo Moreno (fisioterapeuta), Álex Sánchez (preparador físico), Fran Rubio (fisioterapeuta) y Juan José López (doctor) completan el círculo de confianza de un joven tenista que inicia mañana en Melbourne su camino hacia la cima del tenis mundial.
Él lo acepta con total naturalidad. No se encoge en la pista y asume que las comparaciones con los más grandes de la historia reciente de este juego, Federer, Nadal y Djokovic, son inevitables. Cuanto más crezca Alcaraz más le compararán con los mejores. A él solo le interesa lo primero, no obstante. Lo segundo, que es parte del negocio, lo deja apartado a un lado.
No quiere Alcaraz confianzas en su debut, por más que su rival sea el desconocido Alejandro Tabilo, número 136 del mundo. El chileno llega de la previa y ya tiene los deberes hechos en Melbourne. Jugará sin ningún tipo de presión, sabiendo que todo lo que logre frente a Alcaraz es un premio extra. La obligación de vencer -ahora sí- es para el murciano, quien a sus 18 años va a empezar a experimentar esta semana lo que supone entrar en la pista como favorito. Es el número 33 del mundo, ya no tiene que jugar previas ni beneficiarse de invitaciones de la organización de los distintos torneos y muchas veces será cabeza de serie. Cambia el contexto, pero el pupilo de Juan Carlos Ferrero está preparado para competir en este nuevo escenario que se le presenta.
En Melbourne, eso sí, solo parte como favorito en la primera ronda. Si supera a Tabilo (el año pasado le endosó un doble 6-1 en la previa de Roland Garros), se cruzará con casi toda probabilidad en el segundo partido del torneo con el serbio Dusan Lajovic. Es el 43 del mundo y tiene menos nivel que el murciano, pero se trata de un jugador peligroso. Sin ir más lejos, el pasado martes tumbó con solvencia al malagueño Alejandro Davidovich en el torneo de Sídney. La montaña se empinaría mucho en una hipotética tercera ronda, donde podría aparecer el italiano Matteo Berrettini, número 7 del mundo. Carreño o Norrie en octavos serían los siguientes rivales de Alcaraz. Ya veremos.
El reto de Alcaraz, que el año pasado se despidió en segunda ronda de Melbourne Park tras caer con el sueco Mikael Ymer, es llegar a la segunda semana del torneo. Sería un inicio excelente para un 2022 en el que no ha jugado ningún torneo preparatorio en Australia y en el que ya ha confirmado su calendario hasta abril. Río de Janeiro, Acapulco, Indian Wells y Miami serán sus siguientes paradas, antes de una gira de tierra que le llevará a Montecarlo, Barcelona, Madrid, Roma y París.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión