La ruta de la torrija en seis restaurantes de la Región de Murcia
La receta de pan bañado en leche y frito en aceite es un clásico de los días de Pasión que se repite en numerosos restaurantes
Monas de Pascua, buñuelos o leche frita compiten por el puesto de dulce típico de la Semana Santa, pero hay un postre que ocupa la primera posición indudable: las torrijas. Esa rebanada de pan empapada en leche, rebozada con huevo, frita en aceite y endulzada con azúcar y un toque de canela es un básico en estos días que se repite tanto en casas como en restaurantes y reposterías. Sin embargo, poca gente conoce su origen : un postre similar ya aparecía en algún recetario romano del siglo I y fue introducida en Europa por los árabes, variando a lo largo del tiempo su elaboración.
Pero, ¿por qué se asocia a la Semana Santa? Se cree que, durante el tiempo de la Cuaresma en el que no se podía comer carne, las monjas aprovechaban el pan duro en distintas elaboraciones, una de las cuales era bañarlo en leche. Además, también tenía un significado místico, ya que el pan se identificaba con el cuerpo de Cristo. Sea cual sea la razón, lo cierto es que pocos se resisten a este dulce típico. Aunque su versión tradicional no incluye más ingredientes que los mencionados, hay opciones originales como las de café, crema, caramelizadas o incluso de vino tinto, cuyo único límite es la imaginación.
La ruta de la torrija
Calle Sociedad, 1, Murcia
La Bien Pagá
La reina de los postres en este restaurante de cocina moderna de temporada es su torrija de brioche y horchata con helado de cacahuete y toffee, una creación que recuerda al clásico con un toque diferenciador. Es la seña de identidad de esta gastro-taberna donde la cocina de mercado personal es la clave.
Calle Fuensanta, 4, Murcia
Restaurante Keki
Una torrija a la plancha con sopa de caramelo y vainilla helada es la protagonista de los postres en este restaurante durante la Semana Santa. Su receta es ejemplo del gusto por la cocina creativa y mediterránea que reina en la carta, siempre elaborada con la innovación y creatividad de la mano del chef Sergio Martínez.
Calle Santa Teresa, 66, Los Alcázares
La Tropical
Uno de los restaurantes imprescindibles del Mar Menor es el responsable de la considerada para muchos como 'La Torrija', en mayúsculas. Su postre estrella, elaborado con Baileys y pipas de calabaza garrapiñadas, es el final perfecto para su cocina mediterránea tradicional y de nueva creación.
Avenida Luis de los Reyes, Bullas
Borrego Canalla
Con un ambiente informal y moderno a la par que elegante, el restaurante de Bullas destaca por recetas clásicas pasadas por la creatividad, como su particular cocina fusión japoespañola. Además de sus platos salados, de sus postres destaca su torrija especialmente caramelizada con toffee.
Paseo Alfonso XIII, 46, Cartagena
La Tasca del Tío Andrés
Aunque hayas pedido de más, una comida en este local de cocina tradicional con sabores característicos no pueden terminar sin una torrija como postre. Allí se puede probar una típica receta cartagenera, elaborada con licor de Baileys y acompañada con helado de café asiático.
Calle Castillo, 18, Molina de Segura
La Maita
La cocina de raíces del chef Tomás Écija avala este restaurante recomendado en la guía Michelin. Emplazado en los restos de la muralla del castillo en Molina, destaca por una fusión japo-murciana que da lugar a una cocina divertida y original. Entre sus postres, la torrija casera caramelizada es un imprescindible.
Su elaboración es sencilla, por lo que muchas personas elaboran estos días torrijas en sus propias cocinas. Pero si prefieres recibirlas directamente en el plato, siempre puedes probarlas en uno de los restaurantes que te recomendamos, que además las incluyen en su carta durante todo el año. En Murcia, la gastro-taberna de La Bien Pagá cuenta con una versión de pan brioche con helado de cacahuete y toffee, perfecta para los amantes de lo dulce. De dulzor similar es la torrija de Keki, acompañada de una sopa de caramelo y vainilla helada.
Ningún punto de la Región se resiste a este adorado postre que destaca sobremanera en el alcazareño La Tropical, con una versión de Baileys y pipas garrapiñadas que es, para muchos, la mejor de la Región. Le sigue de cerca la receta de Borrego Canalla, en Bullas, que le aporta un extra de dulce con el caramelo de toffee. La ruta de la torrija continúa en la cartagenera Tasca del Tío Andrés y su típica versión de la zona a base de Baileys y helado de café asiático. Para terminar, Tomás Écija ofrece en Molina de Segura una torrija casera caramelizada capaz de enamorar a cualquier paladar.
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