¿Arañazos en el coche? El truco definitivo para repararlos en unos segundos

La aparición de roces en la carrocería de un vehículo resulta inevitable con el paso del tiempo. Estas marcas, que afectan a la apariencia del coche, se producen, en multitud de ocasiones, por culpa de un tercero: un conductor que abre su puerta sin cuidado, una maniobra desafortunada al estacionar o incluso un peatón que daña accidentalmente la pintura al pasar.

A pesar de que estos arañazos pueden parecer insignificantes, lo cierto es que pueden influir en su valor a la hora de venderlo, reduciendo notablemente su precio. Además, dependiendo de la profundidad a la que se haya producido, se puede dar el caso de que deje expuesta la chapa del turismo, lo que podría derivar a la larga en un aspecto oxidado en esa zona.

Afortunadamente, las redes sociales se han hecho eco de este habitual infortunio y han compartido algunos trucos que ayudan a minimizar o eliminar estos rasguños. Una de las opciones más recurridas es adquirir en el supermercado o tiendas especializadas un 'kit' que incluye una crema reparadora y diversas herramientas para aplicarlo correctamente. Sin embargo, hay algunos remedios caseros, como el de aplicar quitaesmalte o acetona sobre la zona, que permiten minimizar el daño.

Una de las alternativas más sencillas y efectivas para abordar esta situación es la de aplicar laca para el cabello, un producto que se encuentra en numerosos hogares y que se puede comprar en el supermercado a un precio muy económico. Este truco destaca por su rapidez, ya que mejora el aspecto de la carrocería en menos de un minuto.

Para aplicar este truco, en primer lugar, hay que asegurarse de limpiar bien la zona afectada para que la laca pueda actuar directamente en el arañazo. A continuación, se debe rociar un poco de laca a unos cuantos centímetros de distancia y, con la ayuda de un paño o bayeta, se empieza a frotar suavemente por el área afectada. De este modo, se borrará la marca.

Es importante recordar que esta opción es efectiva para aquellos daños que son muy superficiales. Además, hay que tener en cuenta que este truco no sustituye una reparación profesional, sino que tan solo se ha popularizado como un buen remedio para aquellos que busquen una solución económica.

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