¿Cada cuánto tiempo hay que cambiar el estropajo de la cocina?

¿Recuerdas cuándo fue la última vez que cambiaste el estropajo de la cocina? Si te cuesta saber con certeza cuál fue la fecha aproximada, deberías renovarlo inmediatamente.

Los estropajos son los utensilios que utilizamos para limpiar y desinfectar algunas zonas de nuestras casas como el cuarto de baño o la cocina. En el caso de las cocinas, por ejemplo, los usamos para fregar los platos, limpiar las encimeras, recoger las migas de pan que quedan sobre el mantel, alguna que otra mancha o agua que se nos ha derramado.

Como elementos de limpieza que son, tanto los estropajos como las bayetas, presuponemos que siempre están limpios. Sin embargo, estos pueden albergar diferentes bacterias. Por este motivo es importante que lleves un pequeño control sobre el estado en el que se encuentran, ya que cuando más deteriorados estén, más probabilidad existe de que proliferen las bacterias, tal y como advierte la Organización de Consumidores y Usuarios. 

Los estropajos son el sitio perfecto para que las bacterias se desarrollen debido a que están fabricadas de un material poroso y a que se encuentran durante la mayor parte del tiempo sumergidas en agua o con humedad.

Según un estudio del Instituto de Medicina de Precisión (IPM) de la Universidad de Furtwangen, Villingen-Schwenningen, en Alemania, publicado por la revista 'Scientific Reports', este tipo de esponjas de cocina albergan más microbios que los retretes de los cuartos de baño. Comparan la cantidad de bacterias encontradas con los niveles existentes en las heces y explican que tan sólo hay más suciedad en los desagües.

Algunas de las bacterias que viven en las esponjas son estafilococos, salmonella o E. Coli, entre muchas otras.

Para utilizar los estropajos de forma correcta debemos destinar uno a cada espacio, es decir, debemos tener un utensilio para limpiar las piezas del cuarto de baño y otro diferente para la cocina.

Además, también podemos utilizar un estropajo para fregar los platos y una bayeta para la encimera, ya que de esta forma estaremos impidiendo que las bacterias se esparzan de un sitio para otro. De lo contrario, podemos contribuir a la contaminación cruzada de nuestras manos o los alimentos que estemos manipulando.

La frecuencia con la que debes cambiar el estropajo de la cocina, o del cuarto de baño, es cada semana o como mucho cada dos semanas. Nada de renovar estos utensilios para la higiene cuando tengan un aspecto sucio y desgastado. Aunque veamos que se encuentran en aparentes perfectas condiciones debemos desecharlos semanalmente para mantener las bacterias a raya.

Con la llegada de la Covid-19, el Ministerio de Sanidad incluyó la limpieza y desinfección de los estropajos como una de las medidas higiénicas a tener en cuenta para la prevención de contagios, aunque no se ha demostrado que se produzcan a través de los alimentos o las superficies.

Estas no son las únicas medidas que deberíamos tener en cuenta para una correcta higiene.

La OCU recomienda eliminar los restos de comida después de cada uso, ya que estos sirven como nutrientes para las bacterias que favorecen su crecimiento. Otra recomendación es aclarar, escurrir y dejar secar después de cada uso y añadir unas gotas de lejía.

Tanto para limpiar como desinfectar las bayetas o los estropajos debes sumergirlos en agua con lejía diluida al 10% entre cinco y diez minutos. Después, tienes que aclararlos y dejarlos secar bien. Si estás utilizando una bayeta, recuerda dejarla extendida para evitar que se acumule la humedad.

Recuerda que estas son medidas de higiene diaria pero que aun así, debes renovar estos utensilios de limpieza con la frecuencia anteriormente indicada.