La Comunidad de Regantes de Totana clama por una dotación de agua equitativa
Lunes, 20 de noviembre 2023, 00:48
El agua es un bien escaso en la Comunidad de Regantes de Totana, que cuenta con 4.826 regantes y una superficie total de 10.765 ha regables. Porque los agricultores ni siquiera tienen asegurada el agua necesaria para las cosechas en curso: «La incertidumbre se está apoderando de ellos y manifiestan de forma reiterada que como la situación continúe así tendrán que abandonar la agricultura, con las repercusiones que esto tendría para la economía local y la regional», alertan desde esta corporación de derecho público.
Precisamente, la escasez hídrica en esta demarcación es histórica. Para muestra, «somos una de las comunidades de regantes de la cuenca del Segura con menos recursos por hectárea», definen, agregando que esta situación de infradotación de recursos ya se reflejó en los Planes Coordinados dictados a partir del Decreto 11/1973, de 12 de enero, con una dotación del 50% del total de la necesaria para el cultivo normal de regadío.
«La situación es pésima, crítica y de extrema gravedad», apostillan. Por contextualizar, conviene recordar que durante el año hidrológico 2022/2023 «tan solo hemos recibido 957,7 m3/ha cuando contamos con dotaciones por valor de 1.883,30 m3/ha», lo que ha generado «momentos de gran incertidumbre sobre la pervivencia de los cultivos en curso y viéndonos obligados a adoptar decisiones muy duras en cuanto a cupos de agua y medidas de cierre de contadores», añaden.
En este sentido, cabe mencionar que la planificación hidrológica de la Cuenca del Segura establece para los regadíos redotados del TTS de Totana, Alhama y Librilla una dotación bruta media de 4.429m3 /ha/año, sin embargo, «dicha dotación nunca se lleva a cabo por falta de recursos», lamentan. Asimismo, «no podemos asegurar a los regantes que integran nuestras comunidades que puedan dar término a las cosechas en curso ni tampoco podemos apoyarles en los cultivos planificados para el año hidrológico, contribuyendo al empobrecimiento y reducción de la agricultura en las áreas de nuestros perímetros regables», explican con resignación.
Este nuevo año hidrológico se prevé duro, tanto que para el primer trimestre tan solo han recibido 194.5 m3/ha, es decir, una dotación «insuficiente» para poder desarrollar cualquier tipo de plantación en su perímetro. A esto se suman otros factores, como la reducción de las cantidades recibidas del Trasvase Tajo-Segura, la escasez de lluvias, la demora en la resolución de varios expedientes que podrían conceder nuevos volúmenes de aguas desaladas, y por el aumento de la demanda de consumo de agua con destino abastecimiento.
La Comunidad de Regantes de Totana ha demostrado una capacidad natural de adaptación a cualquier circunstancia. Uno de sus puntos fuertes es su apuesta firme y decidida por la innovación tecnológica, con el propósito de mejorar la gestión eficiente y sostenible del agua. En concreto, ha puesto a disposición de sus regantes unas sondas de humedad que permiten trasladar en tiempo real las necesidades hídricas de la planta, propiciando que los agricultores puedan utilizar el agua de la forma más eficiente y adaptando los riegos a las necesidades de cada cultivo y momento. También cuenta con un sistema de incidencias conectado con los operarios de campo para dar respuesta a los regantes de un modo muy rápido.
Al hilo, construyó este verano una tubería en la zona de regadío consolidado para poder abastecer, sin necesidad de elevación, una superficie de 1.000 ha con agua procedente de la IDAM de Águilas, lo que se traducen en aumento de la eficiencia energética de la red.
La Comunidad de Regantes de Totana, que dispone de una gran variedad de cultivos con necesidades hídricas muy poco homogéneas a lo largo del año, vislumbra un horizonte repleto de retos para los que ya tiene una hoja de ruta planificada. De ellos, destaca el proyecto para la mejora del aprovechamiento y gestión de los recursos de aguas no convencionales, cuya ejecución persigue su total digitalización y la ampliación de las reservas de aguas embalsadas, convirtiéndose así en una de las comunidades de regantes con mayor grado de modernización en España. Igualmente, prevé la construcción de unas balsas para la recogida de aguas pluviales y la concurrencia al PERTE digital.
Más información en: https://trasvasetajosegura.org/