Una verde Domenica de Ramos
La Cofradía del Santísimo Cristo de la Esperanza organiza su procesión este domingo desde San Pedro bajo un cielo casi despejado
Con cielos casi despejados, según la previsión del servicio de Meteorología, podrá desfilar esta tarde el cortejo que organiza la Pontificia, Real y Venerable Cofradía del Santísimo Cristo de la Esperanza, María Santísima de los Dolores y del Santo Celo por la Salvación de las Almas.
La procesión de la Domenica de Ramos está encabezada por el paso de Francisco Liza llamado 'Dejad que los niños se acerquen a mí', que muestra a Jesús, aún alejado de la Pasión. El resto del cortejo lo conforman siete tronos de gran belleza. El primero, el Arrepentimiento y Perdón de María Magdalena, presenta a Jesús ante una mesa, revestida de fino mantel y ricas viandas. Son todas naturales. Las esculturas son obra de Francisco Liza Alarcón y Antonio Castaño Liza.


El siguiente trono es el llamado 'de la burrica' y representa a Jesús entrando en Jerusalén. Es un conjunto escultórico obra de Hernández Navarro. Le sigue en el cortejo el paso de San Pedro, o del gallo, del genial Salzillo. El desfile del Nazareno de Baglietto, que compone el siguiente trono en la procesión, es acogido con fervor por el público, tanto por la seriedad de los estantes al portar la sagrada imagen como por la devoción que recibe de cuantos la admiran al pasar. A continuación desfilará San Juan, obra de Antonio Castaño Liza, que fue estrenada el año pasado. El trono de María Santísima de los Dolores es uno de los más aclamados del cortejo. Realizada por Salzillo en 1756. El titular, el Santísimo Cristo de la Esperanza, también obra de Francisco Salzillo y cierra el cortejo de túnicas verdes.