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La falta de contundencia está dejando al Real Murcia sin los puntos que necesita para aspirar a lo máximo. Tanto le aleja de las victorias ... que ya suma tres derrotas en las últimas cuatro jornadas. El problema aparece en las dos áreas, pero el dato más significativo está ahora en la propia. Después de caer 2-1 ante el Atlético de Madrid B, el equipo que dirige Fran Fernández ya encadena seis encuentros encajando al menos un gol. Nunca había concedido tanto. Es su peor racha con diferencia. Los rivales no necesitan acumular muchas ocasiones. Ahora marcan en cualquier situación.
En la jornada 21, el Real Murcia sumó en Yecla su segunda victoria seguida con dos puertas a cero. Solo llevaba 17 goles en contra en Liga. Pero desde entonces, en solo seis partidos, ha encajado nueve, más de la mitad. Incluso en grandes festivales como los de Marbella y Mérida tampoco pudo cerrar al máximo su portería (victorias por 1-4). Alcoyano, Sevilla Atlético y UD Ibiza también han sabido perforar la portería de Gianfranco Gazzaniga.
«Una semana más, una falta de atención puntual nos condena», se lamentaba el técnico almeriense el pasado viernes. No solo el primer puesto está en juego. También el propio filial colchonero aprieta por detrás y Castilla y Sevilla Atlético pueden encarecer el 'playoff' «El equipo hace muchas cosas bien, pero en las áreas hay que estar mejor. Hay que reaccionar ya. No puede ser que en los últimos partidos recibamos siempre goles», admitía también Fran Fernández.
No solo se trata de que el equipo haya encajado muchos goles en las recientes semanas. La sensación es que también lo ha hecho con demasiada facilidad, con algún descuido atrás y sin que los rivales tuvieran que tener un gran dominio o contar con muchas ocasiones. Cuando han tenido una oportunidad, la han aprovechado ante un Murcia que aunque conceda poco, puede encajar en cualquier momento y de varias formas como córners, centros, dentro del área, en la frontal o al contragolpe.
El Alcoyano se llevó la victoria del estadio Enrique Roca con un saque de esquina en el que Atienza pudo rematar con el pie. Una semana después, fue Pere Marco el que aprovechó un centro lateral para elevarse en el área y rematar sin una gran oposición. Y ante el Sevilla Atlético llegó otro fallo en la marca cuando Oso, desde el punto de penalti, remató completamente solo. Ya en la segunda parte, el filial hispalense sentenció a la contra, en una salida de Gazzaniga en la que el portero llegó tarde y la pelota se la llevó Mejía para marcar a puerta vacía.
Incluso en Mérida hubo un disgusto en defensa. En un partido donde el equipo ganó en un estadio invicto, se hizo con el liderato y limitó el potencial ofensivo de su rival, tuvo afrontar un momento de dificultad cuando los locales empataron en un centro que desvió Saveljich para que Liberto Beltrán rematara delante del guardameta. Un infortunio con solución. Pero ante el Ibiza también encajó cuando parecía contener bien a su rival. Dos zarpazos tras el descanso de Bebé y Javi Jiménez desmontaron al Murcia. Finalmente, en Majadahonda recibió dos tantos con facilidad. En el primero concedió mucho espacio para que Adrián Niño chutara en la frontal y en el segundo no supo cortar otro avance del delantero.
El Real Murcia ya pasó por una fase parecida en el primer tercio de la temporada en el que también fue el primer mal momento del equipo entre derrotas y eliminaciones. Vivió la que había sido hasta ahora su peor racha encajando goles. Hasta en cuatro partidos oficiales consecutivos recibió al menos un tanto: en la jornada 5 ante el Hércules (2-0), en los dieciseisavos de final de la Copa Federación contra el Sabadell (1-1), en la jornada 6 frente al Betis Deportivo (0-1) y en la jornada 7, en este caso ya con una victoria, ante el Alcorcón (3-1). La impresión general era la misma que ahora. Los goles en contra eran muy evitables.
A partir de ahí, el equipo empezó a entonarse. De hecho, encadenó tres jornadas sin encajar, entre la 8 y la 10 ante Recreativo de Huelva, Marbella y Villarreal B. Desde entonces, fue sumando poco a poco nuevas porterías a cero incluidas aquellas dos de manera consecutiva ante el Hércules y el Yeclano Deportivo. Ahora le toca volver a recomponerse para recuperar la fiabilidad necesaria para aspirar al primer puesto y que el 'playoff' tampoco corra peligro.
El debate sobre jugar con dos delanteros ha sido recurrente en torno a Fran Fernánez. El técnico del Real Murcia nunca descartaba públicamente esa posibilidad, pero su predilección estaba clara al jugar con un único punta en un 4-2-3-1. Hasta ahora. En los últimos tres partidos, encontró la fórmula para encajarlo todo. Incluso para elevar la apuesta. Con Pedro Benito y Davo en las bandas, jugó con tres delanteros ante la AD Mérida, la UD Ibiza y el Atlético de Madrid B. Pero en los dos últimos encuentros tampoco pudo traducir en goles sus méritos en el juego. «Solo nos ha faltado ese último pase, el tiro. Hemos llegado mucho a línea de fondo», comentó Fran Fernández.
El equipo lleva tres encuentros seguidos sin marcar en el Enrique Roca y en Majadahonda apenas aprovechó su presencia en campo rival. Sí hubo un hilo de luz cuando precisamente los tres atacantes fabricaron el empate. Davo conectó con Flakus y el punta asistió para Pedro Benito. «Tenemos más para crear más ocasiones. No vale de nada que en zona de iniciación y de creación lo hagamos bien y que las áreas nos penalicen tanto», subrayó el técnico.
Antes del comienzo de la presente jornada, el Murcia solo era el octavo equipo más goleador del grupo, con 33 tantos en 26 jornadas. Hasta 22 fueron a domicilio. Su gran debe está en casa, con 11 en 13 encuentros y quedándose sin marcar en siete de ellos, más de la mitad. Esta vez, esos problemas con el gol se trasladaron fuera de casa.
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